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La producción primaria fitoplanctónica en Caleta Potter es extremadamente baja. Esto contrasta con la abundante biomasa del macrozoobentos. Si bien se reconoce la importancia del microfitobentos como recurso nutricional para estos organismos, no hay muchos trabajos que expresen su abundancia y distribución tanto espacial como temporal. El objetivo de este trabajo fue determinar la variación anual en la concentración de pigmentos (Clor.-a) y contenido de materia orgánica (MO) en los sedimentos para diferentes profundidades (5 m, 10 m, 20 m, 30 m) a lo largo de un año, y su relación con la variación del material particulado en la columna de agua y en trampas de sedimento estudiadas simultáneamente. Los datos se interpretarán en función de parámetros tales como la luz incidente, salinidad y temperatura. Resultados preliminares obtenidos del análisis de sedimentos obtenidos mediante muestreadores de PVC sobre una transecta transversal a la costa entre diciembre de 1997 y diciembre de 1998 indican que la concentración de Clor.-a. en los sedimentos difirió significativamente entre los distintos meses del año (estudiados mediante ANOVA), con valores máximos para marzo y abril y mínimos para agosto y septiembre, siendo la variabilidad a 5 m mucho más importante que a profundidades mayores. La concentración de MO no varió significativamente a lo largo del año. La falta de correlación entre la concentración de Clor.-a. y la MO sugiere que existen en el sistema otras fuentes de MO externas al aporte de la comunidad bentónica vegetal. La luz, marcada por una fuerte estacionalidad en los ambientes antárticos y por el aporte glaciario de partículas a la columna de agua en ambientes costeros modifica la radiación incidente, es probablemente el factor que controla en mayor medida la producción primaria bentónica. Recién a fines de febrero, cuando los aportes de materiales desde la costa disminuye, se aprecian picos de biomasa microfitobentónica.

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