EVALUACIÓN DE LA INTEGRIDAD FUNCIONAL DE ARROYOS PAMPEANOS MEDIANTE TASA DE DESCOMPOSICIÓN

TORREMORELL, ANA; VILCHES, CAROLINA; TAGLIAFERRO, MARINA; GORBARAN, ROCÍO; RECH, MARIELA; KRAVETZ, SEBASTIAN; ZUNINO, EDUARDO; GIORGI, ADONIS

Lanús, Buenos Aires

Jornada; IV JORNADAS NACIONALES DE DESARROLLO SUSTENTABLE DE CUENCAS HÍDRICAS; 2015

DEPARTAMENTO DE DE SARROL LO PRODUCT IIVO Y TECNOLÓGIICO, Universidad Nacional de Lanús

La integridad de un ecosistema se puede evaluar mediante el estudio de los procesos que ocurren en este. Cambios en la estructura de un ecosistema no siempre se corresponden con cambios en la funcionalidad y viceversa. Los procesos de un ecosistema nos dan un panorama más general que el estudio de los atributos estructurales porque no dependen de la presencia de algunas especies en particular, por lo tanto, los procesos son menos dependientes de las regiones geográficas. El estudio de la descomposición de la hojarasca se considera un proceso indicador porque es una medida sensible a factores que afectan la salud de los arroyos. Dependiendo del tipo de disturbio, la descomposición puede ser más rápida o más lenta que en sitios de referencia. La descomposición en los arroyos involucra un rango amplio de organismos, desde bacterias y hongos hasta invertebrados y peces, sugiriendo que el impacto antrópico sobre la descomposición de la hojarasca resulta ser un blanco de estudio muy interesante. Se estudiaron tres arroyos de la región pampeana cercanos a zonas urbanas. Arroyos Chozas, Giles y Salgado que atraviesan las ciudades General Rodríguez, San Andrés de Giles y Lobos, respectivamente. Se determinaron las tasas de descomposición en los tres arroyos, en cada arroyo se seleccionó un sitio de referencia (aguas arriba de la ciudad, tramo 1) y un sitio impactado (aguas abajo de la ciudad, tramo 2). La duración del experimento fue de 103 días y se realizó entre octubre de 2014 y enero de 2015. Se colocaron 25 bolsas de descomposición en cada tramo y se retiraron 5 bolsas a los 15, 30, 48, 77 y 103 días. El material vegetal fue lavado, secado y pesado. Las tasas de descomposición se determinaron mediante ajuste a un modelo exponencial negativo. Se encontró que el arroyo más afectado fue el Salgado, luego el Giles y por último el Chozas. Las tasas de descomposición son buenos indicadores por su rol central en el funcionamiento de los arroyos. El poder implementar estos índices es muy importante porque no se necesita ser especialista para interpretar los resultados. Su determinación es relativamente fácil y económica. Actualmente existe una gran cantidad de datos bibliográficos que permiten la comparación con otros sitios tanto impactados como de referencias que servirían para evaluar el grado y posiblemente también el tipo de impacto.