Provision of housing in Latin American and New Urban Agenda

ANDREA CATENAZZI Y MARÍA MERCEDES DI VIRGILIO.

Austin

Conferencia; Conferencia en el marco del LLILAS Visiting Professor Program (VRP); 2017

En Octubre de 2016, Naciones Unidades celebró en Quito, Ecuador, la tercera gran cumbre sobre Vivienda y Desarrollo Sostenible (Hábitat III). La Nueva Agenda Urbana ?alineada con el Acuerdo de Paris sobre el Cambio Climático y los Objetivos de Desarrollo Sostenible- condensa los acuerdos que los países suscribieron en la Conferencia y constituye una guía para orientar a los gobiernos y a la sociedad civil en sus acciones en materia de desarrollo de las ciudades, durante los próximos 20 años. El documento dedica varias de sus secciones a la cuestión vivienda. En particular, sobre el acceso a la vivienda plantea la necesidad de la realización progresiva del derecho a una vivienda adecuada, la promoción del desarrollo de políticas y enfoques habitacionales integrados que incorporen la asignación de viviendas adecuadas, asequibles, accesibles, bien conectadas y bien ubicadas. La promoción de la proximidad y el fortalecimiento de la relación espacial con el resto del entramado urbano y las esferas funcionales cercanas en el planeamiento urbano. Asimismo, postula el estímulo a la provisión de diversas opciones de vivienda adecuada que sean asequibles y accesibles para los miembros de diferentes grupos de ingresos, evitando la segregación. A pesar de que los lineamientos, aun sin brindar una definición precisa, reconocen la función social de la vivienda y la necesidad del suministro público de tierras, no queda claro en qué condiciones las ciudades de América Latina enfrentan el desafío de darles cumplimiento. En este marco, la presentación intenta dar cuenta de los desafíos que la implementación de los lineamientos de la Nueva Agenda Urbana encuentra en las ciudades de la región. Para ello, describe las tendencias de la urbanización en América Latina, luego se detiene en el análisis de los requerimientos habitacionales y de las respuestas ensayadas en las últimas décadas. Finalmente, cierra y discute los desafíos que los gobiernos deberán enfrentar en este escenario para responder a los lineamientos de la Nueva Agenda Urbana.