INVESTIGADORES
BOUZA Pablo Jose
artículos
Título:
Hoja Geológica 3569-III/3572-IV Malargüe
Autor/es:
NULLO, FRANCISCO; STEPHENS, G.; COMBINA, A.; DIMIERI, L.; BALDAUF, P.; BOUZA, P.; ZANETTINI, J.C.M.
Revista:
Programa Nacional de Cartas Geológicas de la República Argentina
Editorial:
Servicio Geológico Minero Argentino. Instituto de Geología y Recursos Minerales
Referencias:
Lugar: Buenos Aires; Año: 2005 vol. 346 p. 1 - 85
ISSN:
0328-2333
Resumen:
Servicio Geológico Minero Argentino. Instituto de Geología y Recursos Minerales, Boletín 346, 85p. Buenos Aires. ISSN 0328-2333, 2005   Hoja Geológica 3569-III/3572-IV Malargüe,  provincia de Mendoza   Nullo, F.E., G. Stephens, A. Combina,  L. Dimieri, P. Baldauf , P. Bouza y J.C.M.  Zanettini, Resumen: La Unidad más antiguas de la Hoja Geológica 3569-III/3572-IV Malargüe es la Formación Arroyo Mendino, considerada del Paleozoico superior e integrada por esquistos y pelitas dinamometamorfizadas de muy escasa representación. Le sigue un importante evento volcánico que tuvo lugar durante el Pérmico superior-Triásico medio, desde el norte de San Juan hasta el sur de Neuquen, conocido como el Grupo Choiyoi, caracterizado por volcanitas principalmente ácidas y mesosilícicas. Durante el Triásico superior tuvo lugar la depositación del Grupo Tronquimalal (conglomerados y areniscas), la intrusión del Granito y pórfido del Chihuido, y la sedimentación de la Formación Remoredo (areniscas y tufitas). Con la Formación Puesto Araya (areniscas y conglomerados) se manifiesta la Unidad marina más antigua reconocida en la comarca, cuya edad se adjudica al Sinemuriano-Toarciano. Le siguen areniscas y pelitas de la Formación Tres Esquinas que se acumularon durante el Aaleniano al Calloviano inferior. En el Sur del área aflora la Formación Lajas (areniscas calcáreas y conglomerados) que caracterizan los depósitos marinos poco profundos, asignados al Bathoniano-Calloviano inferior. En el área de Bardas Blancas, en discordancia con la Formación Tres Esquinas, se ha reconocido la Formación Calabozo (rocas carbonáticas) de la misma edad que la Formación Lajas, seguida por los depósitos de yeso de la Formación Tábanos, asignados al Calloviano medio-superior. Luego de esta fuerte desecación de la cuenca, se depositan en el Oxfordiano las calizas marinas de la Formación La Manga, en tanto que en el Oxfordiano superior-Kimmeridgiano, se acumularon nuevamente depósitos de yeso de la Formación Auquilco. El retiro del mar de la cuenca permitió la depositación durante el Kimmeridgiano de las areniscas continentales de la Formación Tordillo. Entre el Tithoniano inferior tardío hasta el Barremiano, la cuenca es invadida nuevamente por el mar, acumulándose las sedimentitas marinas del Grupo Mendoza, con pelitas bituminosas en la base (Formación Vaca Muerta), calizas arrecifales en la parte media (Formación Chachao) y niveles de calizas y coquinas en el tramo superior (Formación Agrio). El ciclo marino se cierra con depósitos evaporíticos agrupados en la Formación Huitrín, que se adjudica al (Aptiano-Albiano). En el sector occidental de la comarca se identificaron depósitos continentales de la Formación Diamante que se adjudican al Cretácico superior. Una nueva ingresión marina somera caracterizada por depósitos marinos y continentales del Grupo Malargüe se verifica en la región. Dentro del Grupo Malargüe se han carteado las Formaciones Loncoche (areniscas tobáceas, pelitas calcáreas) y Roca (calizas, coquinas, pelitas), adjudicadas al Campaniano superior-Maastrichtiano. La Formación Pircala (areniscas, arcillitas, yeso), que forma parte de esta último Grupo, se optó por mapearla en forma conjunta con la Formación Coihueco, pese a que esta última Unidad se apoya en pseudoconcordancia sobre la primera. Estas últimas unidades se depositaron durante el lapso Maastrichtiano superior-Paleoceno. Durante el Mioceno inferior a superior se desarrolló un importante evento volcánico en el sector de faja plegada, con la disposición de cuerpos subvolcánicos de composición intermedia (Ciclo Eruptivo Huincán). Los cubren depósitos clásticos compuestos en la base por conglomerados (“Rodados Lustrosos”) y luego por depósitos clásticos compuestos por rocas volcánicas intermedias desarrollados durante el Mioceno medio (Formación Agua de la Piedra). En el sur del área, derrames basálticos del Mioceno superior, hoy sobreelevados, se agrupan en la Formación Coyocho inferior, mientras que al oeste de la localidad de Malargüe, depósitos clásticos y continentales y piroclásticos (Formación Pincheira) se desarrollaron por arriba de las coladas basálticas. Durante el Plioceno inferior la región fue cubierta por depósitos, hoy sobreelevados de conglomerados y areniscas correspondientes al Primer Nivel de agradación, derramándose seguidamente en el Plioceno tardío y el Pleistoceno temprano coladas basálticas de las Formaciones Coyocho superior y Chapúa. En el Cuaternario, se manifiestan en el Pleistoceno inferior los Depósitos del Segundo Nivel de agradación, identificándose además nuevos derrames basálticos correspondiente a la Formación el Puente. El Pleistoceno se completa con las ignimbritas y tobas de la Formación Loma Seca y los depósitos de la llanura pedemontana. Finalmente en el Holoceno se identificaron nuevas coladas basálticas asignadas a los Basaltos Cerro Campanario y Peteroa, a los que suceden Depósitos morénicos, basaltos de la Formación Tromen, Depósitos eólicos y Depósitos aluviales. Los más importantes recursos mineros de la Hoja desde el punto de vista económico están dados por los hidrocarburos líquidos y gaseosos. Con respecto a los depósitos metalíferos, fueron relevantes las mineralizaciones de plomo-zinc y sobre todo las de uranio-cobre epidiagenético. Entre los minerales industriales son de particular importancia económica los depósitos de yeso, calizas y tobas. Algunas yacencias de asfaltitas fueron explotadas para combustible y representan un recurso potencial para la comarca.