INVESTIGADORES
OSSWALD andres Miguel
capítulos de libros
Título:
Síntesis y multiplicidad. Algunas indicaciones husserlianas sobre la ontología de Diferencia y Repetición
Autor/es:
CELIA CABRERA; JULIÁN FERREYRA; SOLANGE HEFFESSE; VERÓNICA KRETSCHEL; ANA INÉS MARKMAN; RAFAEL MC NAMARA; ANDRÉS OSSWALD; PABLO PACHILA; MARÍA DE LOS ÁNGELES RUIZ; GONZALO SANTAYA; MATÍAS SOICH
Libro:
Deleuze y las fuentes de su filosofía
Editorial:
La Almohada
Referencias:
Lugar: Buenos Aires; Año: 2014; p. 48 - 58
Resumen:
¿Cómo comprender lo que se lee en filosofía? ¿Qué hacer cuando nos enfrentamos a un texto oscuro (como tan frecuentemente ocurre, como necesariamente ocurre cuando somos descarriados del sentido común)? Primera vía: reponer el sentido común, pedir un mapa, un plano, una guía que reduzca lo nuevo a lo conocido. Una representación. Un profesor, un intérprete. Explicame lo que dice acá. Esa vía parece clausurada en el estudio de Gilles Deleuze (1925-1995), quien ha construido su obra para mantenerla a salvo de las garras de la representación. Objetivo especialmente logrado en su obra cumbre, Diferencia y repetición de 1968, que es una fortaleza, un búnker oscuro donde la representación es repelida por los sentidos que se envuelven, se pliegan y se despliegan al infinito. El fracaso de los manuales e introducciones por representar este libro ha sido rotundo. El grupo ?Deleuze: ontología práctica? (coloquialmente conocido como ?La deleuziana?) se dedica desde finales del año 2006 a intentar decodificar ese libro sin código o manual de instrucciones. Luego de años dándole golpes y alaridos a partir de la lectura detallada y la discusión grupal, nuestro grupo de saqueadores de ideas se internó, casi sin darse cuenta, en una segunda vía con la cual tener herramientas para enfrentar un texto oscuro. No ya ir ?hacia adelante?, hacia la tradición interpretativa del texto, sino ?hacia atrás?, hacia su genealogía profunda. No hacia adelante, hacia aquellos textos que leyeron a Deleuze, sino hacia atrás, hacia aquellos textos que Deleuze leyó. Las fuentes de su pensamiento, en las cuales se alimentó, de las cuales se embebió para producir su obra.