INVESTIGADORES
SIMON Paula Cecilia
capítulos de libros
Título:
Francisco Madrid en la escena teatral rioplatense
Autor/es:
SIMÓN, PAULA
Libro:
Literatura dramática del exilio republicano.
Editorial:
Renacimiento
Referencias:
Lugar: Sevilla; Año: 2018; p. 363 - 373
Resumen:
Francisco Madrid nació en Barcelona el 24 de febrero de 1900. El teatro no fue su primer amor, pero sí uno de los duraderos, ya que lo cultivó tanto antes de la Guerra Civil, como durante sus dieciséis años de exilio en Buenos Aires, que se extendió desde 1936 hasta 1952, cuando falleció en esa ciudad sudamericana. Su primer amor fue el periodismo, vocación que descubrió en su juventud, gracias a sus colaboraciones en los periódicos. Sin embargo, el teatro significó para él una vía segura de escape creativo. Antes de la Guerra Civil, exhibió en Barcelona varias comedias y farsas originales. En el exilio argentino, Francisco Madrid estrenó cuatro obras originales en los teatros porteños entre 1939 y 1946, sobre cuya amable recepción tenemos noticia por las diversas crónicas periodísticas disponibles en la prensa local. El 1 de junio de 1939 la compañía de Mecha Ortiz exhibió Los besos no pagan multa. El día que llegó Adelfa fue presentada el 21 de mayo de 1940 en el Teatro Avenida por la compañía encabezada por su propia esposa, María Luisa Rodríguez, y por Manuel Perales. El 27 de septiembre de ese mismo año el grupo Comedia Dramática de Blanca Podestá le estrenó La vida dramática de Marie Curie en el Smart Palace, una obra escrita en colaboración con Alejandro Casona sobre la base de la biografía escrita por Ève Curie, hija de la científica polaca, que Madrid tradujo al español en 1939 con el título La vida heroica de Marie Curie. La última obra fue La Isabela y fue exhibida en el Teatro Argentino de Buenos Aires el 14 de marzo de 1946, a cargo de la compañía de actores de Nélida Quiroga y Ricardo Canales. La Isabela fue la primera obra representada de las varias que recibieron premios ese año por la Sociedad General de Autores de la Argentina (Argentores), gesto que selló la inclusión de Francisco Madrid en el teatro argentino.