Funguemia y colonización de catéteres en pacientes pediátricos hospitalizados.

GIUSIANO GE; MANGIATERRA ML; ROJAS FD; GÓMEZ MV

Universidad Nacional del Nordeste. Corrientes

Jornada; Comunicaciones Científicas y Tecnologicas 2003; 2003

Secretaria General de Ciencia y Técnica. unne

En los últimos años se ha observado un significativo aumento de aislamientos de organismos levaduriformes en niños hospitalizados, particularmente en neonatos en NUCI y en UTI. Candida spp. aparece como un importante patógeno nosocomial emergente junto a otras levaduras antes consideradas saprofitas, inocuas o que raramente producían enfermedad. Muchas de estas infecciones provienen de fuentes endógenas y su frecuencia está influida por la población de pacientes, los regímenes de tratamiento, los antibióticos y otras medidas de cuidado, como por ejemplo la hiperalimentación parenteral. A esto se debe sumar la vía exógena de adquisición de estas infecciones a través de las manos infectadas de enfermeras, infusiones, artefactos biomédicos y el medio ambiente inanimado contaminados. Estos hechos y la emergente resistencia a los antifúngicos de las especies de Candida son la mayor preocupación. Importantes cambios en la epidemiología de las candidiasis se han observado en los últimos años, como así también, variación de la incidencia de estas micosis según las diferentes regiones geográficas. Las levaduras más comúnmente informadas como causa de funguemias, candidiasis diseminada y como colonizadores de catéteres son especies del género Candida, aunque también se aislan Cryptococcus y ocasionalmente especies como Hansenula anomala y Trichosporon cutaneum. Se encontró una disminución de las candidemias por Candida albicans (C. albicans), un incremento en la proporción de infecciones producidas por C. parapsilosis y la emergencia de resistencia antifúngica entre las Candida spp. Se ha sugerido que una explicación de la emergencia de especies diferentes de C. albicans sería la selección de especies menos susceptibles a los agentes antifúngicos. Sin embargo, las terapias a largo plazo y la profilaxia parecen ser las responsables del desarrollo de resistencia, donde el fluconazol juega un importante rol. C. krusei y C. glabrata son frecuentemente citadas como micota colonizante emergente durante el uso clínico de fluconazol y están asociadas a fracasos terapéuticos. C. krusei presenta resistencia primaria y C. glabrata se ha demostrado desarrolla de resistencia secundaria durante el tratamiento con este antifúngico. Este fenómeno también se ha observado en C. albicans pero es muy poco frecuente en comparación a las otras especies de este género, que en general, se consideran todas son potencialmente propensas a desarrollar resistencia secundaria. Si bien los índices de mortalidad por candidemia son menores en pacientes pediátricos que en adultos, el reconocimiento de factores predisponentes junto con la temprana detección y tratamiento de las infecciones hematológicas por Candida, son las claves para disminuir el riesgo de esta mortalidad. El reconocimiento de Candida spp. como patógenos predominantes, la indiscriminada utilización de antifúngicos azólicos y la capacidad de desarrollar resistencia de estas especies emergentes, enfatiza la necesidad de realizar una vigilancia continua para monitorear la epidemiología de la candidemia y la susceptibilidad antifúngica para detectar emergencia de resistencia. El objetivo del estudio es conocer la frecuencia de aparición de distintas especies de levaduras en pacientes pediátricos en unidades de cuidados intensivos y oncológicos hospitalizados y los perfiles de resistencia a las drogas antifúngicas de uso convenciona