ADECUACION DE LA INGESTA DE NUTRIENTES Y LAS PRACTICAS DE ALIMENTACION COMPLEMENTARIA EN UNA POBLACIÓN VULNERABLE DE LA LOCALIDAD DE TACO POZO, CHACO

SPIPP, JESSICA PAULA; LLANES, IVANA ANDREA; MARRI, DANIEL ALEJANDRO; RIVAS, FRANCO P.; RIERNERSMAN, CAROLA NOELIA

Sáenz Peña

Jornada; Reunión de Difusión de la Labor Docente, Científica, Tecnológica y de Extensión del AÑO 2021; 2021

Universidad Nacional del Chaco Austral

Las practicas alimentarias óptimas en el lactante se sitúan dentro de las intervenciones más efectivas para mejorar la salud actual y futura de los niños pequeños. El objetivo de este estudio fue evaluar la ingesta de energía, nutrientes y las prácticas de alimentación complementaria en niños de 6 a 23 meses de edad de la localidad de Taco Pozo, Chaco. Se realizó un estudio descriptivo transversal en una muestra de 138 niños que concurrieron al Hospital Santa Rosa de Lima durante el segundo semestre del 2019, previa firma del consentimiento informado por parte del tutor. La ingesta dietética se determinó utilizando recordatorios de 24 horas. Se compararon los resultados con las recomendaciones de las Ingestas Dietéticas de Referencia (IDR) establecidos por la National Academy of Sciences (2002/2005) y el valor de Requerimiento Promedio Estimado (RPE) establecido por la Food and Agriculture Organization (2001). Las prácticas alimentarias se valoraron según los indicadores establecidos por la Organización Mundial de la Salud (2009). La ingesta promedio sobrepasó las IDR en las proteínas (152% de adecuación) y vitamina C (161,3%), mientras que proporcionó menos de 1/3 de las IDR para la vitamina D (24,3%). Los nutrientes que alcanzaron mayores proporciones de niños con ingestas por debajo del RPE fueron las calorías (52,9%), vitamina E (92%), vitamina D (89%), hierro (75,8%), calcio (66,7%) y vitamina A (64,5%). En cuanto a las prácticas alimentarias, se observó una diversidad alimentaria mínima del 61,5%, una frecuencia mínima de comidas del 69,0% y una dieta mínima aceptable del 52,9%. Se concluye que existe una elevada prevalencia de inadecuación para la energía y los nutrientes típicamente críticos en la etapa de alimentación complementaria. Se requieren intervenciones nutricionales y educativas para promover practicas alimentarias saludables y mejorar las ingestas de micronutrientes en los niños menores de dos años.