INVESTIGADORES
BELOTTI LOPEZ DE MEDINA Carlos Raul
congresos y reuniones científicas
Título:
Guacamayo señorial. Identificación de los restos de psitácido recuperado en la tumba 11 de El Morro, sitio la Isla (Tilcara, Jujuy)
Autor/es:
BELOTTI LÓPEZ DE MEDINA, CARLOS
Lugar:
Malargüe, Mendoza
Reunión:
Congreso; I Congreso Nacional de Zooarqueología Argentina; 2008
Institución organizadora:
Museo de Historia Natural de San Rafael, Instituto de Arqueología (FFyL-UBA), INAPL (Secretaria de Cultura, Presidencia de La Nación), Museo de Antropología (FFyH-UNC), INCUAPA (FCS-UNCPBA)
Resumen:
La tumba 11 de la necrópolis El Morro, localizada en el sitio La Isla de Tilcara (Provincia de Jujuy) y asignada por diferentes autores a los periodos de Medio o Tardío del Formativo, constituye uno de los contextos arqueológicos más importantes de la prehistoria del NOA debido a la abundancia y calidad de las ofrendas mortuorias. Estas incluyen desde piezas cerámicas del estilo Isla Policromo, a cascabeles de bronce y piezas de oro laminado. Una de estas ofrendas es el esqueleto de un psitácido identificado simplemente como “loro” en el informe original (número de catalogo 2615). En este trabajo presentamos los resultados de un análisis arqueozoológico realizado sobre esta ofrenda. La primera fase del estudio consistió en una identificación anatómica y sistemática de los elementos óseos, seguida por la cuantificación de las observaciones. Así pudimos determinar que se trataba de un esqueleto casi completo de un ejemplar grande de la familia Psittacidae. La segunda parte del estudio consistió en una identificación taxonómica más refinada, a partir de la comparación por análisis de clusters de mediciones osteométricas. La comparación se realizó con esqueletos de distintas especies de los géneros Amazona, Ara, Anodorhynchus y Propyrrhura, pertenecientes a la colección de ornitología del Museo Argentino de Ciencias Naturales (MACN – CONICET). Los resultados obtenidos permiten afirmar que el psitácido ofrendado era un guacamayo de gran tamaño, en el rango del guacamayo aliverde (Ara chloroptera), el cual puede llegar a pesar entre 1 y 1,45 Kg. Debemos destacar que todas las especies de guacamayos habitan regiones forestales alejadas de la Quebrada de Humahuaca, y que este hallazgo evidencia la extensión de las redes sociales prehistóricas. Lamentablemente, otras especies de los géneros Ara y Anodorhynchus poseen tamaños similares, lo cual impide hablar de una especie en particular o de una determinada región de origen.