INVESTIGADORES
WILLIAMS Veronica Isabel
congresos y reuniones científicas
Título:
RUTAS Y SENDEROS COMO PAISAJES. LAS QUEBRADAS ALTAS DEL VALLE CALCHAQUI MEDIO (SALTA)
Autor/es:
VERÓNICA I. WILLIAMS
Lugar:
San Pedro de Atacama
Reunión:
Taller; Taller Qhapac Ñan 1; 2015
Institución organizadora:
Universidad Catolica del Norte
Resumen:
En los últimos treinta años los investigadores han avanzado en conocer y definir la naturaleza diversa del Imperio Inka delineando trayectorias históricas divergentes, más que dar por sentado procesos homogéneos para los Andes en general. Para realizar un acercamiento a los procesos micro políticos del noroeste argentino (NOA) es necesario concebir al Tawantinsuyu como una entidad política dinámica que enfrentó circunstancias particulares en cada región anexada. No obstante no debemos dejar de reconocer que el desarrollo diferenciado de la investigación arqueológica en los Andes puede acentuar o atenuar las improntas del Imperio o sus consecuencias en los procesos locales. El objetivo de esta ponencia es comprender la construcción de las particulares espacialidades inka en las quebradas altas del sector medio del valle Calchaqui (Gualfin, Tacuil y Luracatao) en la provincia de Salta donde el camino es una de las variables presentes. Para ello debemos indagar sobre los desarrollos políticos y socioeconómicos impulsados por el Estado así como la reproducción de prácticas sociales por parte del Inka. Las cuencas de Molinos, Angastaco y Luracatao y sus correspondientes tributarios, son los principales aportes de agua permanente, que sirvieron como vía de comunicación entre los valles mesotermales y la puna (salares de Ratones, Diabillos y Hombre Muerto). A la llegada de los inkas el paisaje arqueológico de estas quebradas estaba constituido por la proliferación de asentamientos del tipo pukara y escasísimos conjuntos habitacionales diseminados en las partes bajas del valle. La presencia inka está reflejada en asentamientos con clara arquitectura imperial que fueron construidos en lugares relativamente alejados de los asentamientos locales y de las áreas productivas como son el Pukara y Tambo de Angastaco, sobre una de las terrazas del rio Calchaquí (1900 msnm), de fácil visibilidad y acceso; el tambo de Gualfín en fondo de valle en el rio Gualfín y los sitios tipo ?celdas? de Gualfín y Compuel en el piso de puna (3500 msnm). La vialidad imperial al ser concebida como un símbolo de poder del estado para los territorios y pueblos conquistados, pudo haber funcionado como bisagra en la unión de dos paisajes, el local y el estatal. La red de caminos, eje a partir del cual se estructuró el paisaje estatal, fue un marcador espacial en la territorialidad simbólica del Estado. En el área de estudio los caminos y senderos vincularon social y espacialmente a sitios estatales, a los pukara con orígenes en el Periodo de Desarrollos Regionales, a las áreas agrícolas (más de 300 ha en total) y al arte con determinados motivos rupestres, que al estar vinculados con actividades rituales y ofrendas, resignificaron espacios como huacas, reforzando y reafirmando la apropiación simbólica del paisaje.