CIECS   20730
CENTRO DE INVESTIGACIONES Y ESTUDIOS SOBRE CULTURA Y SOCIEDAD
Unidad Ejecutora - UE
congresos y reuniones científicas
Título:
Región metropolitana o área metropolitana? Ventajas del abordaje regional para los territorios metropolitanos
Autor/es:
SARA BOCCOLINI
Lugar:
México DF
Reunión:
Congreso; I Congreso de Estudios sobre la Ciudad; 2021
Institución organizadora:
Universida Autónoma de México
Resumen:
(EN PRENSA)La importancia de los grandes sistemas metropolitanos como territorios que concentran personas, poder político y económico en el mundo y especialmente en Latinoamérica es indiscutible. Y aunque es innegable que concentran grandes desigualdades, también tienen el potencial para promover el desarrollo personal y comunitario de forma inclusiva, equitativa y sostenible. Sin embargo, las intervenciones destinadas a incrementar la calidad de vida metropolitana no siempre son exitosas, a pesar de los recursos técnicos y políticos invertidos. Las causas de esto son múltiples; suelen incluir problemas de voluntad política, disponibilidad de recursos (humanos, económicos, técnicos), o del enfoque utilizado en el diagnóstico y definición de planes y proyectos. Este trabajo aborda este problema concentrándose en su dimensión ontológica: se considera que el análisis y planificación a escala metropolitana es difícil sin reflexionar sobre cuál es realmente el objeto a comprender, valorar e intervenir.La discusión se centra en las diferencias entre dos conceptos utilizados de manera indistinta demasiado frecuentemente -área metropolitana y región metropolitana- y lo que implican las limitaciones y posibilidades propias de cada término en las etapas de análisis, diagnóstico y propuestas de intervención, con ejemplos concretos de regiones metropolitanas medias en Latinoamérica, especialmente Argentina. El análisis histórico-bibliográfico de ambos términos, y de su uso para definir territorios concretos sirve como base para la valoración de trabajos de análisis y ordenamiento territorial significativos, y su impacto en el desarrollo a mediano y largo plazo.Los resultados muestran que el término área metropolitana se difunde en los estudios urbanos desde ámbitos político-administrativos y técnicos, para designar unidades socio-territoriales que exceden la unidad urbana y que deben ser registradas (en censos demográficos y productivos), ordenadas, o planificadas (con el dictado de normas civiles, comerciales y de uso del suelo). En ocasiones, la delimitación de un área metropolitana es producto de concertaciones políticas para un fin específico; esto provoca delimitaciones basadas sólo en la posibilidad o no de lograr un acuerdo político, y no en función de las relaciones de interdependencia reales entre territorios, dejando fuera elementos ´conflictivos´ pero determinantes en el sistema territorial. En otros casos, su delimitación responde a criterios prácticos, como la extensión de áreas conurbadas a partir de un aglomerado urbano o incluyendo centros urbanos a determinada distancia del centro principal. Al originarse con fines prácticos concretos, las entidades socio-territoriales son delimitadas específicamente en función de esos requerimientos, lo que conduce a criterios algo reduccionistas y miradas parciales sobre el sistema metropolitano. Del mismo modo, su origen como concepto desarrollado para/durante el estudio de áreas urbanizadas y desde disciplinas específicas condiciona fuertemente su uso: el término área metropolitana hace referencia a un conjunto de áreas urbanizadas, lo que deja fuera territorios esenciales para el desarrollo del sistema urbano metropolitano, como las áreas periurbanas y suburbanas -fuera de los ejidos municipales- destinadas a alojar población estrechamente interdependiente de los grandes centros urbanizados; excluye además a territorios destinados a la producción de alimentos y obtención de materias primas para los centros urbanos, a territorios operativizados como infraestructura de soporte a procesos del metabolismo urbano, y a territorios de reserva natural que funcionan como soporte ambiental de esos procesos. Por su parte, el término región metropolitana -frecuentemente considerado semejante al de área metropolitana, utilizado de forma indistinta o sólo para denotar un aumento en la magnitud territorial del sistema urbano estudiado- tiene un origen muy diferente. En primer lugar, región no tiene una connotación urbana excluyente, sino que refiere a una multiplicidad de paisajes/territorios que pueden, sin embargo, identificarse como una unidad por cierta afinidad ecosistémica o cultural. Su delimitación depende específicamente del grado y extensión de las interrelaciones entre los elementos que componen un sistema urbano, sean ambientales o socioproductivas. Su carácter es exploratorio e integral, haciendo foco en las dinámicas socio-ambientales desplegadas en el territorio, su intensidad y capacidad de organizar el sistema metropolitano. Las áreas urbanizadas son elementos protagonistas, pero no autosuficientes; tanto su dependencia del ambiente como su impacto en él son factores esenciales para determinar la delimitación territorial. El análisis muestra que profundizar en la comprensión de los sistemas metropolitanos entendiéndolos como regiones socio-ambientales y no como meras extensiones de áreas urbanizadas permite desarrollar políticas más eficaces para mejorar la calidad de vida de todos sus habitantes. Mientras que las premisas reduccionistas que definen un área metropolitana pueden limitarlos abordajes fenomenológicos e invisibilizar elementos vitales de un sistema metropolitano (dificultando los diagnósticos y el desarrollo de políticas certeras a escala metropolitana), las condiciones que definen a una región metropolitana permiten un abordaje multidimensional y multiescalar a los sistemas urbanos. En consecuencia, facilitan alcanzar una comprensión integral de un fenómeno complejo y dinámico como son los territorios metropolitanos, y permiten desarrollar estrategias de intervención más sostenibles y eficaces.