Género y pobreza: una aproximación a las recuperadoras de

VERGARA GABRIELA

Rosario

Congreso; IV Congreso Iberoamericano de Estudios de Género y IX Jornadas Nacionales de Historia de las Mujeres; 2008

El proceso de deterioro y precarización del mercado laboral en las últimas décadas en Argentina, ha vuelto inevitablemente visibles a actores sociales que en contextos de expulsión, encuentran en la calle una salida a la falta de empleo o a su inestabilidad. Este es el caso de recuperadores y recuperadoras de residuos quienes constituyen figuras cotidianas del paisaje urbano pero que a la vez, se inscriben en un verdadero ´negocio de la basura´ (Aimar, Gianonne y Lisdero 2007). A partir de un trabajo exploratorio realizado en 2006, en la ciudad de San Francisco -Córdoba-, en el marco de una iniciativa para conformar una cooperativa, se analizan 32 entrevistas estructuradas a hombres y mujeres de diferentes barrios de la ciudad que recuperan residuos en la calle en forma independiente. A partir de la información producida, se propone en primer lugar caracterizar las condiciones de vida y trabajo de este grupo de recuperadores. En segundo lugar, se identificarán las percepciones respecto a la actividad según la condición de género, considerando que desde una sociología de los cuerpos es posible dar cuenta de la materialidad de la desigualdad y de los modos en que las relaciones de dominio, conflicto y poder, se hacen cuerpo. Es decir, si estamos pensando en mujeres que ocupan una determinada posición social –pobreza, marginalidad, expulsión- ¿cómo es que llegaron hasta allí? ¿cuáles fueron las trayectorias previas? En este sentido nos referimos tanto a la noción de habitus (Bourdieu 1999), como a la construcción biográfica de la identidad del yo, de Giddens (1991), quienes más allá de sus diferencias coinciden en dar cuenta de los modos en que la sociedad se inscribe en los cuerpos de hombres y mujeres. Esta temporalidad individual pero a la vez social, está atravesada por una espacialidad, por una topología que permite traducir casi literalmente los espacios físicos como sociales: recolectar residuos de la calle, supone en cierta medida la búsqueda incesante de hallar algún lazo –aunque sea un des-hecho- que devuelva la pertenencia social perdida, robada o destruida. La relación con los des-hechos se vuelve hacia los sujetos  también des-hechos en una miríada de vinculaciones fallidas con una sociedad que parece no querer mirarse totalmente en el espejo. Dado que no hay género sin cuerpos sociales, ni estos sin inscripciones de las huellas sociales de la desigualdad, se pretende analizar al menos en forma exploratoria, el universo de los recuperadores y las recuperadoras de residuos, allí donde las tramas del género y la división social del trabajo se funden y confunden.