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La autonomía que el estatuto de la Federación Obrera Tucumana de la Industria Azucarera (FOTIA) otorgó a los sindicatos de base modeló, en gran medida, las formas de protesta de los trabajadores de la agroindustria tucumana durante el primer peronismo. Esta particularidad condujo a reiterados desencuentros entre las bases y la dirigencia de FOTIA, que en ocasiones llegó a desautorizar las medidas de fuerza implementadas por los sindicatos de ingenio. Asimismo, los niveles de autonomía y organización de este segmento del sindicalismo azucarero contribuye a explicar el derrotero de la FOTIA luego de su intervención en 1949. En tal sentido, el proceso de normalización del sindicato azucarero (1949-1955), orientado por una fuerte tendencia centralizadora, que atentaba contra las tradicionales prerrogativas de las bases, dilató la reorganización del gremio hasta la caída de Perón. Por tanto, el objetivo de esta ponencia es analizar la relación entre las bases y la dirigencia de FOTIA entre 1944 y 1955, a fin de examinar de qué forma la autonomía de los sindicatos de ingenio condicionó, hasta 1949, la fisonomía de la protesta obrera y obligó a la dirigencia sindical a asumir un posicionamiento institucional alejado de estas formas de descontento. También se estudiarán las dificultades y resistencias que las autoridades de la intervención del sindicato azucarero tuvieron que enfrentar para modificar el estatuto y avanzar por la senda de la centralización administrada, dejando atrás el carácter descentralizado y federativo de FOTIA, sustento legal de la autonomía de las bases obreras.