Las modulaciones del lenguaje y el conocimiento de sí en la tradición cristiana occidental

RUBÉN PERETÓ RIVAS

Buenos Aires

Jornada; XI Jornadas Internacionales De Iustitia et Iure; 2016

Universidad Católica Argentina

La propuesta, de este trabajo es presentar algunas reflexiones acerca de algunos de los diversos modos que adquirió el lenguaje en la expresión de las realidades cristianas que irrumpen en el ámbito pagano. De un modo particular, me detendré en un lenguaje particular, aquél utilizado para expresar la realidad más íntima y profunda de todo hombre: el sí mismo. Dicho de otro modo, si el precepto délfico ?Conócete a ti mismo? debe ser acatado, la pregunta que surge es acerca del modo en el que ese conocimiento tan particular puede ser expresado a través del lenguaje, o incluso más problemático aún, ¿es posible tal conocimiento cuando el modo humano de conocer es a través de la palabra y el lenguaje?El recurso de los autores cristianos a la palabra para transitar el proceso del autoconocimiento se manifiesta de diversos modos según las épocas y los ámbitos. En algunos casos se tratará de una narración encuadrada en cosmologías que por diversas circunstancias serán dejadas de lado con el correr de los siglos y, en otros, del recurso a la lectura de las Escrituras en clave simbólica. Por otro lado, los autores a los que podría recurrir para profundizar en esta investigación son muchos y variados. San Juan Clímaco, por ejemplo, nos habla de su ?escala santa?, o escala de Jacob, con doce escalones, que implican doce pasos en el camino de acercamiento a Dios y, con él, de conocimiento de sí. O los múltiples escritores que tomaron el libro bíblico del Cantar de los Cantares para comentar el encuentro del alma con el Esposo, encuentro que necesariamente implica en primer término encuentro consigo mismo. En el caso de esta presentación, elegiré como representante del periodo patrístico a Evagrio Póntico (siglo IV y monje del desierto egipcio) y, de los medievales, a algunos autores representativos de los siglos XI y XII, periodo en el cual aparece con mayor fuerza la sed por conocer el complejo humano desde la experiencia.