INVESTIGADORES
MEHL Adriana Ester
congresos y reuniones científicas
Título:
El abanico del río Atuel en la Depresión de los Huarpes (Mendoza, Argentina): geomorfología y evolución ambiental durante el Cuaternario tardío
Autor/es:
MEHL, A. E.; ZÁRATE, M. A.; ROJO, L. D.; MAY JAN-HENDRICK; LORENZO, F. R.
Lugar:
Puerto Madryn
Reunión:
Congreso; VII CACyG; 2018
Institución organizadora:
CENPAT
Resumen:
Los ríos Atuel, Salado y Malargüe son ríos cordilleranos que al salir del frente montañoso han construido abanicos aluviales (35º - 35º35? S) de radio variable entre  36 y 75 km, generando un ambiente de bajada en la depresión tectónica neógena de Los Huarpes (Polanski, 1963). Esta contribución analiza la geomorfología, sedimentología y estratigrafía del abanico del río Atuel, en su cuenca media, a fin de reconstruir su evolución paleoambiental durante el Cuaternario tardío. Se realizaron tareas de campo (levantamiento estratigráfico de secciones representativas, reconocimiento de geoformas) y de gabinete (análisis de imágenes satelitales); se dataron los depósitos con edades radiocarbónicas ?AMS- y por luminiscencia ópticamente estimulada ?OSL-. El abanico del río Atuel presenta un sector proximal, semicircular en planta, donde el río circula con diseño entrelazado hacia el SE por la margen sur de la geoforma; predominan granulometrías psefíticas. En la margen de este sector existen humedales drenados por cursos de diseño paralelo. En la parte media-distal del abanico (ambientes de bañados-salinas y Bolsón de Llancanelo según Abraham, 1996) el diseño del río es sinuoso, con un canal de hasta ~650 m de anchura y barrancas de hasta 10 m de altura; predominan depósitos psamítico-pelíticos. A lo largo del primer tramo, ~ 25 km, el río circula en dirección ~O-E marginando el abanico por el sur; limitado en algunos tramos por afloramientos de ignimbritas/tobas de una planicie de agradación volcaniclástica (¿Formación Loma Seca?) cubierta por un manto eólico, que infrayace mediando una discordancia erosiva, a los depósitos fluviales. Luego, el río modifica su trayecto hacia el NE y atraviesa una llanura de inundación aluvial hasta alcanzar el embalse El Nihuil, donde forma un pequeño delta terminal. En este sector distal, hacia el sur del curso actual del río se extiende una llanura aluvial con numerosos canales sinuosos inactivos; en cambio, hacia el norte, los rasgos de canalización son más escasos, y predominan geoformas de deflación-acumulación eólica, de orientación O-E. En el paraje Puesto Vicencio 2 (35°13?0,591?? S, 69°6?5,4318?? O) la sucesión expuesta (~8 m de potencia ?pot.-) en las barrancas del río, registran un ambiente fluvial entrelazado arenoso en la base (overbank proximal al canal y carga de lecho del canal) a sinuoso/meandriforme en la parte media-superior. Los depósitos basales de arenas gruesas con estratificación entrecruzada tabular y lentes de guija interestratificadas arrojaron una edad mínima de 54  3,8 ka (OSL en clastos de arena feldespáticos). Hacia arriba continúan arenas finas, medianas y/o gruesas, a gravosas, en bancos horizontales, macizos y/o con laminación ondulítica, interestratificados con arcillas rojizas, limos, y escasos lentes de guijas. De Francesco y Dieguez (2006) reportaron una configuración similar en Puesto Vicencio (~1,5 km aguas arriba de PV 2; pot. ~10 m; 35° 13? 34?? S, 69° 06? 42?? O). A lo largo de las barrancas, la sección media presenta también depósitos de acreción lateral tipo point-bar (~2 m de altura y ~3 m anchura). En Puesto Moya (35°15?44.50?? S, 69°14?28.13?? O; ~15 km aguas arriba de PV2) aflora una sucesión sedimentaria granodecreciente (pot. ~4.5 m) con depósitos de point-bar a meandro en colmatación (conglomerados polimícticos basales; hacia arriba alternan limos arenosos, macizos y/o laminados; lateralmente el depósito ?pot. 1.20 m- exhibe estructura entrecruzada tangencial en la base, y niveles límnicos y pelítico arenosos con laminación subhorizontal en la parte superior). La materia orgánica sedimentaria de dos niveles límnicos se dató en 1137 ± 20 y 656 ± 19 años 14C AP. (Prof.: 1 m y 0,55 m, respectivamente). De Francesco y Hassan (2012) reportaron edades entre 2.890 y 793 años 14C AP para Puesto Moya, mientras que un depósito cercano correlacionable fue datado en 651± 57 años 14C AP (De Francesco y Dieguez, 2006).El sector medio-distal del abanico del río Atuel se construyó a finales del Pleistoceno a partir de un ambiente fluvial entrelazado arenoso; en el Holoceno tardío se registra un diseño meandroso. Las características geomorfológicas actuales del abanico sugieren una migración del río Atuel de N a S. El patrón paleoambiental obtenido es correlacionable con los ambientes inferidos en la cuenca del arroyo La Estacada (Depresión de Tunuyán), prolongación hacia el norte de la Depresión de Los Huarpes. Además, se infiere que el curso actual del río Atuel en el sector de abanico medio-distal es un rasgo geomorfológico joven (< 656 ± 19 años 14C AP), condición registrada en otros sistemas fluviales del piedemonte mendocino (Mehl y Zárate, 2012). Referencias: Abraham, E.M., 1996. Mapa geomorfológico Mendoza - sector sur. Inventario de Recursos de la Región andina Argentina. Sistema Físico Ambiental de Cuyo. Provincia de Mendoza. De Francesco, C.G. y Dieguez, S., 2006. Paleoambientes del Cuaternario tardío del sur de Mendoza: estado del conocimiento, problemas y perspectivas. Anales de Arqueología y Etnología, Volumen especial Nº 61, 69-80.Hassan G.S., De Francesco, C.G. y Dieguez, S., 2012. The significance of modern diatoms as paleoenvironmental indicators along an altitudinal gradient in the Andean piedmont of central Argentina. Palaeogeography, Palaeoclimatology, Palaeoecology 369, 349-360.Mehl, A. y Zárate, M.A., 2012. Late Pleistocene and Holocene environmental and climatic conditions in the eastern Andean piedmont of Mendoza (33˚-34˚S, Argentina). Journal of South American Earth Sciences 37, 41-59. DOI: 10.1016/j.jsames.2012.01.003Polanski, J., 1963. Estratigrafía, neotectónica y geomorfología del Pleistoceno pedemontano entre los ríos Diamante y Mendoza. Revista de la Asociación Geológica Argentina 17 (3/4), 127-349.