INVESTIGADORES
MAYER Liliana Judith
capítulos de libros
Título:
2. ¿Proyectos solidarios o participativos? Notas sobre los modos de construcción de instancias participativas en escuelas de elite
Autor/es:
MAYER LILIANA
Libro:
ESCUELAS SECUNDARIAS PRIVADAS, POLÍTICA Y PARTICIPACIÓN
Editorial:
TESEO
Referencias:
Lugar: Buenos Aires; Año: 2023; p. 67 - 102
Resumen:
La participación estudiantil en escuelas secundarias consti- tuye un campo de interés y reflexión dentro de la investiga- ción educativa. Desde diversos estudios, se entiende que la acción colectiva en los ámbitos escolares constituye un eje central de los procesos de escolarización, teniendo en cuen- ta la formación y el ejercicio de las ciudadanías juveniles (Reguillo Cruz, 2003; Larrondo, 2014; Larrondo y Mayer, 2018; Núñez, 2017). En este sentido, el protagonismo de los estudiantes en este ámbito y su constitución en cuanto actores se puede observar tanto en el presente como desde el punto de vista histórico en nuestro país y en la región.Dentro de este contexto y de la diversidad de pro- puestas educativas del subsistema privado, están las ins- tituciones que adhieren a programas internacionales. Esta pertenencia se materializa bajo dos formas predominantes: escuelas binacionales, es decir que, además de pertenecer al sistema educativo argentino, son parte de la red de escue- las en el exterior de un segundo Estado, tratándose por lo general de redes de países europeos, lo que también se relaciona con formas de geopolítica y diplomacia púbica o cultural (Mayer y Gottau, 2022b); y, de manera más predo- minante, las escuelas que forman parte del mundo del Bachi- llerato internacional o mundo IB –por sus siglas en inglés–, a través de su afiliación a la Organización del Bachillerato Internacional (OBI), con sede en Ginebra. Los programas del IB comenzaron hace más de cuarenta años, para asistir a públicos nómades –grupos familiares que, por cuestiones de trabajo, migraban frecuentemente– a través de un pro- grama de reconocimiento a nivel mundial que permitiera la movilidad estudiantil. Con el devenir de los años, se fue expandiendo a otros ámbitos y públicos, a la par que fue agregando otras dimensiones de reconocimiento en el cam- po educativo, basadas en el entendimiento en la diversidad cultural, la mentalidad internacional y la promoción de una “ciudadanía global” comprometida con objetivos relaciona- dos con el desarrollo sustentable y el reconocimiento de las diferencias. Esta perspectiva está alineada a los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), en particular el número 4, referido a la educación, donde se enumeran competencias que desarrollar en los estudiantes: tolerancia, respecto a la diversidad, empatía y la solidaridad como estructurante de todos estos.