INVESTIGADORES
CAMARERO Hernan
congresos y reuniones científicas
Título:
Interpretando (una vez más) la relación entre lo sindical y lo político: el Comité de Propaganda Gremial y las disyuntivas del socialismo argentino a comienzos del siglo XX
Autor/es:
HERNÁN CAMARERO
Lugar:
Ciudad Autónoma de Buenos Aires
Reunión:
Congreso; X Congreso Nacional de Estudios del Trabajo: Pensar un mejor trabajo. Acuerdos, controversias y propuestas; 2011
Institución organizadora:
Asociación Argentina de Especialistas en Estudios del Trabajo (ASET), Facultad de Ciencias Económicas, Universidad de Buenos Aires
Resumen:
El objetivo de esta ponencia es proponer una reflexión acerca del vínculo entre sindicato y partido, tal como éste le fue planteado al movimiento obrero argentino, bajo el carácter de desafío crucial, hacia comienzos del siglo XX. Como estudio específico para colaborar a una comprensión de dicho dilema, se someterá a análisis la existencia del Comité de Propaganda Gremial (CPG). Se trató de un organismo que intervino entre 1914-1917 en el interior, y en parte también en el exterior, del Partido Socialista (PS) argentino, teniendo bajo su dirección la creación de decenas de sindicatos, fomentando la necesidad de la acción gremial y proponiendo la sindicalización de base múltiple. El CPG fue impulsado por trabajadores militantes de la corriente de izquierda revolucionaria e internacionalista del PS, que poco tiempo después, a fines de 1917, acabó siendo expulsada de esa fuerza política y constituyó el Partido Socialista Internacional (antecedente del Partido Comunista). La experiencia del CPG merece examinarse pues fue un intento sistemático de superar la estrategia oficial del PS en tono al asunto, según la cual el movimiento obrero debía ser completamente independiente del partido, y contar con tácticas propias y fines específicos. La paradoja es evidente y ha sido muchas veces señalada: el PS se definía como una organización representativa de la clase trabajadora, no obstante lo cual, su relación con la esfera gremial fue esquiva y volátil. La ortodoxia partidaria establecía que la acción política y la acción sindical debían marchar por caminos separados, con gremios entendidos como entes autónomos, libres de toda tutela partidaria. En los hechos, esto condujo a cierto desinterés del PS por la cuestión gremial, la cual quedó más bien desplazada por el mayor peso que ocuparon las campañas electorales y políticas generales, la acción parlamentaria, las tareas socio-culturales e, incluso, las labores cooperativas. Sólo un pequeño sector de los afiliados socialistas estaba agremiado a sus respectivos sindicatos. Este distanciamiento socialista de la problemática sindical fue acompañado por una posición cada vez más externa de las luchas obreras, las que eran apoyadas, pero con el condicionamiento de que superaran rápidamente su radicalidad y se avinieran a la negociación. Las maniobras legislativas del PS se ocuparían de prevenir estos desbordes y de “civilizar” la lucha de clases. El desarrollo de la corriente sindicalista revolucionaria, desde 1905-1906, había sido la primera gran apuesta para superar esta dificultad socialista por articular la lucha sindical con la política, con la sencilla solución de anular la segunda y disolverla en la primera. La alternativa del CPG fue la de restablecer la necesidad de una relación más fructífera entre partido y sindicato. Para el análisis detenido de la historia del CPG nos apoyaremos en los propios informes y materiales internos y públicos del CPG, la prensa socialista (La Vanguardia y otros periódicos) y los órganos de las otras corrientes del movimiento obrero que se refirieron a dicho fenómeno.