INVESTIGADORES
MACHUCA laura marcela
congresos y reuniones científicas
Título:
Cercospora kikuchii: Determinación de su sensibilidad in vitro a compuestos fungicidas. Puesta a punto de la metodología
Autor/es:
MACHUCA LAURA MARCELA; PERETTI LEANDRO
Lugar:
Ciudad Universitaria de la Universidad Nacional del Litoral, Santa Fe, Argentina.
Reunión:
Jornada; Décimo Segundo Encuentro de Jóvenes Investigadores de la Universidad Nacional del Litoral y Tercer Encuentro Jóvenes Investigadores de Universidades de Santa Fe; 2008
Institución organizadora:
Universidad Nacional del Litoral
Resumen:
La soja (Glycine max L. Merr.) es uno de los cultivos más importantes en la Provincia de Santa Fe. El clima cálido y húmedo favorece su labranza y es justamente este tipo de clima, propio de la región, el que contribuye a la aparición de enfermedades que provocan significativas mermas de calidad y rendimientos. Las patologías fúngicas que aparecen al final de ciclo, entre las que se encuentran las causadas por el género Cercospora, producen la maduración precoz de las plantas, lo que genera una reducción en el rendimiento así como en la calidad de las semillas (Pioli, 2007), constituyendo un problema importante, debido a que no sólo disminuyen su valor nutricional, sino que ocasionan deterioro severo de las cosechas y pérdidas en la producción. El tizón de la hoja que pertenece al grupo de las denominadas Enfermedades de Final del Ciclo (EFC), es originada por el hongo Cercospora kikuchii (Matsumoto & Tomoyasu) M. W. Gardner, que también es responsable de producir la mancha púrpura de la semilla (Sillón y col, 2002). Se ha logrado acrecentar la producción de soja, con un uso más intensivo de fertilizantes, fungicidas y herbicidas, combinado con cultivares de mayor potencial genético, la difusión masiva de materiales transgénicos en soja y el uso de prácticas de manejo como la siembra directa (Ferraris y col., 2002). A pesar de estos esfuerzos, la necesidad de evitar las enfermedades y, consecuentemente, las pérdidas en la producción determina que la soja sea la principal responsable del aumento en la utilización de agroquímicos. Carmona (2007) y Formento (2007) han reportado que, en Argentina, sobre todo en los últimos 10 años, la aplicación adecuada de diferentes fungicidas pudo controlar eficazmente a los hongos responsables de las enfermedades en el cultivo de la soja, lo que ha incentivado, a los productores, a incrementar la superficie tratada contra las EFC. Durante la campaña 2006-2007, el 40% del área total sembrada, recibió tratamiento fitosanitario contra las EFC, siendo las provincias de Córdoba, Santa Fe y Entre Ríos donde más se incrementó el uso de fungicidas. Algunos de los productos utilizados son bencimidazoles, imidazoles, triazoles, estrobirulinas (Distéfano y col., 2007). Los triazoles solos o la combinación de los triazoles y estrobirulinas han resultado efectivos para el control de las enfermedades foliares (Formento, 2007). Lamentablemente, los agroquímicos aún cuando se ajusten lo más posible a la exigencia de baja ecotoxicidad, afectan al hombre y dañan el ambiente, ya que una vez aplicados, pueden contaminar y acumularse en el aire, el agua (inclusive fuentes subterráneas de agua potable), distintos alimentos y la tierra. Si bien la exposición puede ser aguda, es más preocupante la que se produce en forma crónica a bajas dosis ya que múltiples exposiciones pueden ser aditivas en sus efectos sobre la salud humana y animal. C. kikuchii es uno de los hongos prevalentes en la zona central de la provincia de Santa Fe. Es importante destacar que los resultados de estudios de la genética poblacional de este patógeno sugieren que ha aumentado su severidad (Carmona, 2007) y patogenicidad (Schneider, 2008). También se ha reportado que, desde la década de los 90, algunas genovariedades de C. kikuchii han desarrollado resistencia a algunos compuestos benzimidazólicos (Imazaki y col, 2006), por lo que resulta importante monitorear la evolución de la sensibilidad a los funguicidas. Esta propuesta de trabajo se sustenta en la hipótesis de que la variabilidad genética en aislamientos regionales de Cercospora kikuchii, demostrada por el grupo de trabajo, en los hongos aislados durante las campañas 2004-2005, 2005-2006 y 2006-2007 (Lurá y col., 2007) podría generar diferencias en las respuestas a los distintos compuestos fungicidas. Nuetro objetivo es poner a punto la técnica de dilución en caldo para determinar la sensibilidad de Cercospora kikuchii a compuestos fungicidas.