Filogeografía y modelado de nicho ecológico del Graomys griseoflavus (Waterhouse 1837) (Cricetidae), ¿tiene el polimorfismo Robertsoniano un origen único y secuencial?

JOSÉ H. URQUIZO; LUIS IGNACIO FERRO; JUAN JOSÉ MARTÍNEZ

Puerto Iguazú

Jornada; XXXIII Jornadas Argentinas de Mastozoología; 2022

Sociedad Argentina para el estudio de los Mamíferos

Se propusieron dos hipótesis para explicar el origen de los reordenamientos Robertsonianos (Rb) en Graomys griseoflavus. Una plantea que estos se generaron sin reducciones en el tamaño poblacional, bajo un contexto parapátrico. La otra propone un origen único y secuencial de las variantes Rb. Para evaluar ambas hipótesis, combinamos filogeografía y modelado de nicho ecológico para caracterizar la historia evolutiva de esta especie. Usamos 99 secuencias de cyt-b, cubriendo su amplio rango de distribución (2300 km). La red de haplotipos muestra señales de múltiples expansiones poblacionales. Detectamos cuatro grupos genéticos, dos de ellos (grupo 1 y 2) ocupan un amplio rango geográfico, principalmente en la ecorregión del Monte. Los grupos 3 y 4 se encuentran restringidos geográficamente y con pocas muestras. Las curvas “mismatch distribution” resultaron unimodales para ambos grupos. El análisis “Bayesian Skyline” indica que el crecimiento demográfico inició hace 150.000 y 50.000 años para los grupos 1 y 2 respectivamente, el grupo 1 incremento notablemente su media poblacional. La distribución espacial de los grupos coincidió con las áreas de mayor habitabilidad estimadas bajo condiciones actuales. Las proyecciones a escenarios pasados sugieren la presencia de dos refugios glaciares principales, concordantes con los grupos 1 y 2. Según el análisis de difusión espacial, el origen de G. griseoflavus sería en la provincia de La Rioja, migrando posteriormente a La Pampa (grupo 1, 220.000 años atrás) y Chubut/Santa Cruz (grupo 2, 210.000 años). Luego del ultimo máximo glaciar (20.000 años), el grupo 1 migró nuevamente hacia áreas ocupadas por el grupo 2, y en simultáneo ambas continuaron dispersándose hacia ecorregiones marginales de su distribución (Espinal y Chaco). Los patrones de expansión poblacional en contextos de dispersión parapátricos y de posterior contacto secundario, nos permiten, junto a la evidencia citogenética, apoyar el origen múltiple de las translocaciones Rb en G. griseoflavus.