INVESTIGADORES
MARO guadalupe
congresos y reuniones científicas
Título:
ESTRATIGRAFÍA Y ESTILOS DE ERUPCIÓN DEL VOLCANISMO MONOGENÉTICO MIOCENO DE PUNA JUJEÑA
Autor/es:
CAFFE, PABLO J.; MARO, GUADALUPE; PRESTA, JUAN
Lugar:
Neuquén
Reunión:
Congreso; XVIII Congreso Geológico Argentino; 2011
Resumen:
Las manifestaciones del volcanismo monogenético máfico (andesitas basálticas olivínicas a andesitas
piroxénicas y piroxeno-hornblendíferas) de la Puna jujeña, son poco abundantes y menos estudiados que sus
contrapartes dacíticas a riolíticas eruptadas desde grandes calderas o volcanes poligenéticos compuestos. A pesar
de su escasa resolución areal, entender la estratigrafía de detalle de estos centros es útil tanto para reconstruir su
historia eruptiva y los mecanismos eruptivos actuantes (a su vez relevante para el estudio de riesgos volcánicos),
así como para correlacionar estos últimos con las variantes composicionales que pudieran identificarse
petrográfica o geoquímicamente en cada sistema magmático (ej. Cabrera y Caffe 2009).
Los centros monogenéticos de Puna jujeña están distribuidos en una faja que bordea al arco volcánico
actual ~80 km hacia el retroarco. Se trata de pequeñas estructuras eruptivas que pueden verse aisladas o
asociadas a volcanes compuestos, pero que más comúnmente forman campos o clusters de diferente tamaño (15
km2
120 km2
) y complejidad. Tanto los campos volcánicos mayores, como la ocurrencia de centros aislados,
suelen alinearse según direcciones submeridianas, coincidentes con la orientación de los corrimientos andinos
principales. Fracturas transversales de rumbo NO-SE y E-O también parecen haber participado en las
erupciones.
Los campos volcánicos estudiados (Fig. 1) en mayor detalle son los de Patahuasi (11-10 Ma), Cerro
Morado (6.7 Ma), El Toro y Campo Negro (pre-6 Ma), Cerro Negro de Olaroz, lavas de Aguiliri y conos de
Múcar-Bayo de Archibarca (los últimos tres de edad incierta pero con morfologías muy erodadas). El campo de
Patahuasi exhibe sólo flujos de lavas y diques, mientras que en Cerro Negro de Olaróz persisten sólo escasas
evidencias de erupciones piroclásticas asociadas, debido a la fuerte erosión y dislocación tectónica que sufrieron
estos campos máficos. El resto de los afloramientos incluyen no sólo lavas y variantes intrusivas, sino también
remanentes de varios conos de escoria con generalmente buen grado de preservación.
Por lo común las lavas tienen bajo a moderado espesor individual (