INVESTIGADORES
GUIDO mario Eduardo
congresos y reuniones científicas
Título:
Relojes y Ritmos Biológicos y su impacto en nuestras vidas
Autor/es:
GUIDO ME
Lugar:
Cordoba
Reunión:
Simposio; Simposio Guillermo Whittembury Academia Nacional de Ciencias y Academia de Ciencias de América Latina (ACAL) (Córdoba Argentina; 2019
Institución organizadora:
Academia Nacional de Ciencias y ACAL
Resumen:
Ponencia en II Simposio Guillermo Whittembury Academia Nacional de Ciencias y Academia de Ciencias de América Latina (ACAL) (Córdoba Argentina) ?Relojes y Ritmos Biológicos y su impacto en nuestras vidas?, Córdoba, Argentina, 9 y 10 de Septiembre de 2019.https://www.acal-scientia.org/ii-simposio-guillermo-whittembury/Los organismos vivos tienen la capacidad de medir el tiempo internamente dado que cuentan con un sistema de temporización denominado sistema circadiano que les ha permitido adaptarse a los cambios ambientales (alternancia día/noche, luz/oscuridad) que ocurren a lo largo del día. Para esto se dispone de un reloj biológico endógeno que regula diversas funciones bioquímicas, fisiológicas y conductuales con un periodo cercano a las 24 h. El sistema circadiano está conformado por relojes centrales (ubicados en el cerebro) y periféricos distribuidos en distintos órganos y tejidos; más aún, hoy se conoce que osciladores también están presentes en células individuales. Dicho sistema circadiano está sustentado genéticamente, concretamente el mecanismo molecular del reloj biológico comprende ciclos de expresión de genes codificantes para proteínas ?reloj? que se prenden y apagan a lo largo de las 24 h, descubrimiento realizado por Hall, Young y Rosbash en drosófila y que les valió el Premio Nobel de Medicina 2017. Es de destacar que este mecanismo está presente en mamíferos también. Sin embargo, un oscilador metabólico ha surgido con mayor anterioridad y está presente en todos los dominios de vida (arquea, procariota, eucariota). A nuestro entender, el reloj celular está conformado por el reloj molecular de transcripción y traducción y el oscilador metabólico. La luz constituye la señal externa más potente para sincronizar el reloj central ubicado en el cerebro a través de un circuito no-visual que va de la retina a distintas áreas nerviosas. Sin embargo, otras señales externas también pueden ser fuertes sincronizantes como la alimentación, la temperatura, la actividad física, entre otras. Con el advenimiento de la modernidad: la luz artificial, los turnos rotativos (nocturnos) en el trabajo, y vuelos trans-meridianos, el ciclo diario de actividad/descanso se ha visto seriamente afectado provocando la desincronización de los procesos fisiológicos endógenos. La disrupción de los ritmos diarios está asociada, entre otros aspectos, a enfermedades metabólicas, a desórdenes en el sueño, depresiones estacionales, etc., como así también a una mayor predisposición a ciertos tipos de cáncer. En la presente disertación se discutirá sobre el funcionamiento del reloj biológico en células tumorales y la implicancia del sistema circadiano en el crecimiento tumoral y la susceptibilidad diferencial de las células cancerosas al tratamiento con agentes quimioterapéuticos en distintos horarios.