INVESTIGADORES
BENIMELI claudia susana
congresos y reuniones científicas
Título:
Aislamiento y selección de cepas de actinomycetes resistentes a plaguicidas clorados
Autor/es:
BENIMELI CS; AMOROSO MJ; CHAILE AP; OLIVER G
Lugar:
Salvador, Brasil
Reunión:
Congreso; XX Congresso Brasileiro de Microbiologia; 1999
Institución organizadora:
Sociedade Brasileira de Microbiologia
Resumen:
Los Actinomycetes constituyen un grupo de bacterias de gran versatilidad metabólica, distribuidos típicamente en suelos y sedimentos acuáticos, muchos de ellos contaminados con componentes orgánicos tóxicos (plaguicidas, derivados de petróleo, etc.); esto hace que estos microorganismos sean de importancia en procesos de biorremediación. Los plaguicidas organoclorados fueron utilizados para el control de vectores transmisores de enfermedades humanas y para el desarrollo de la agricultura,  ocasionando diversos problemas de contaminación ambiental y  trastornos en la salud humana. El objetivo de este trabajo es aislar y caracterizar cepas de Actinomycetes regionales de diversos sedimentos acuáticos con potencial capacidad de crecer en presencia de diferentes plaguicidas clorados y utilizar los mismos como fuente de carbono. Los aislamientos se realizaron de sedimentos provenientes de: 1-embalse El Cadillal, que provee agua para su potabilización y 2- un canal de drenaje en el que se descargan residuos de una planta minera El medio utilizado fue caseína almidón agar con antibióticos. Se aislaron aproximadamente 100 cepas de Actinomycetes. Se evaluó la capacidad de crecimiento de estas cepas frente a 11 compuestos clonados diferentes, realizándose estudios cualitativos y semicuantitativos en medio sólido. Entre 81-85% de las cepas crecieron en presencia de clordano, DDD y DDT. 70-76% de las cepas mostraron resistencia a heptacloro y sus isómeros epóxido A y B, lindano, aldrín y DDE. El 59% de los aislamientos creció en dieldrín, mientras que sólo el 47% lo hizo en metoxicloro. En base a estos resultados es importante considerar que cepas de Actinomycetes poseen un gran potencial en la utilización de compuestos tóxicos como fuente de carbono y esto abre un nuevo camino en la utilización de las mismas en procesos de bioremediación.