INVESTIGADORES
CASTRILLO Maria lorena
congresos y reuniones científicas
Título:
Estrategias, que incluyen a la diversidad fúngica, para manejo sustentable de suelos de sistemas agroforestales yerbateros del Norte de la Provincia de Misiones.
Autor/es:
FASANO, MC; BICH, GA; CASTRILLO, ML; AGOSTINI, JP; ZAPATA, PD
Lugar:
Posadas
Reunión:
Simposio; 2° Simposio Municipal de Investigación, Extensión y Desarrollo local; 2022
Resumen:
La Provincia de Misiones es la principal productora de yerba mate -Ilex paraguariensis St.-Hil. 1822 (Aquifoliaceae)-. Allí, la degradación de la selva subtropical paranaense fue realizada por el modelo extractivista de políticas que colonizaron el Río de La Plata adaptados a cultura, suelos y climas frío-templados europeos. En décadas recientes, instituciones nacionales contribuyeron a dicho modelo tradicional. Estudios hechos desde estas instituciones con datos de suelos pampúmedos (templados fríos) han derivado en prácticas agriculturales que resultaron en la diagramación industrial de cultivos de yerba mate –y de todo cultivo en Argentina- abandonando la cosecha de yerba adaptada a las condiciones edafoclimáticas de la zona que en culturas nativas, respetaba ciclos resilientes del sistema natural –Selva paranaense-.En climas templados fríos de Argentina, los sistemas naturales poseen diversidad biológica menor y suelos que varían considerablemente de los lateríticos oxisoles característicos de la Provincia de Misiones, con temperaturas tropicales húmedas y por tanto, alta diversidad biológica. Esta alta diversidad permite ciclos de regulación naturales de plagas y enfermedades. Cuando se simplifican sistemas naturales, la cobertura del suelo disminuye y así la incorporación de materia orgánica a él; ejemplo de lo descripto son yerbales del sur de la provincia de Misiones. En suelos tropicales con escasa cobertura, temperaturas superiores a 40 grados centígrados se registran en sus horizontes superficiales. Esta, aniquila los microorganismos encargados de la disponibilización de nutrientes (fertilidad biológica) hacia la planta. Las raíces que, en asociación con estos microorganismos –hongos y bacterias- pueden absorber nutrientes, bajo estas condiciones necesitan insumos externos fertilizantes para hacerlo. Paralelamente, el crecimiento de poblaciones de microorganismos que toleren las situaciones de stress son favorecidas. Así las poblaciones stress tolerantes emergen sin tener competencia de sus reguladores (antagonistas - depredadores) que pueden desarrollarse a otras temperaturas no extremas. Resulta evidente que per se no existen plagas y enfermedades sino condiciones de stress que suceden al arrasar un sistema natural (e.g. rozado) que propician el crecimiento de poblaciones y así se tornan perjudiciales. Así, sería lógico adaptar las características del cultivo a las condiciones naturales (la selva) en vez de controlar (vía insumos) las características de la sucesión natural que se disparan cuando arrasamos el sistema natural, es decir, luego de su perturbación (simplificación a monocultivo, por ejemplo).La Fundación Alberto Roth, desde mediados del siglo veinte, fue pionera en el parangón al paradigma productivista mencionado, realizando yerbales bajo árboles nativos, adaptando el cultivo a la selva y generando alta productividad con cultivos asociados. Desde el paradigma de simplificar la selva surgen manejos de cultivos basados en la incorporación de insumos y propiciar la producción a gran escala. Este tipo de producción las decisiones las toman quienes tengan recursos para invertir en insumos; la concentración de tierras es un proceso concomitante ante dicho escenario.La descripción de esta situación permite observar la necesidad de analizar la sustentabilidad en indicadores escalarizados que reflejen dimensiones diversas –ecológicos (además de la diversidad fúngica), sociales y productivos- antes de tomar decisiones de manejo en la Provincia. Una posible aproximación al desarrollo de estrategias para el manejo sustentable de suelos en sistemas agroforestales yerbateros es la caracterización de las comunidades fúngicas como indicadores de las condiciones del suelo. Y a partir de este conocimiento implementar acciones para su conservación o mejora.