INVESTIGADORES
CORDOBA francisco elizalde
congresos y reuniones científicas
Título:
Reconstrucciones hidroclimáticas entre el Tardiglacial y el Antropoceno en el subtrópico de Sudamérica. Desde el este de Uruguay al centro-oeste de Argentina (25° - 37°S ; 53° -68°O).
Autor/es:
PIOVANO, E.; CHIESA, J. ; CÓRDOBA F.; CUÑA, C.; FONT, E.; GUERRA, L.; OJEDA, G.
Lugar:
Ushuaia - Tierra del Fuego
Reunión:
Congreso; VI Congreso Argentino de Cuaternario y Geomorfología; 2015
Institución organizadora:
Asociación Argentina de Cuaternario y Geomorfología
Resumen:
La necesidad de analizar integradamente la variabilidad hidroclimática de alta y baja frecuencia (interanual a intradecadal vs interdecadal en adelante) toma relevancia a partir del gran ?salto hidroclimático? ocurrido en el sudeste del continente sudamericano (SESA) durante la década de los años 70. A grandes rasgos podría sintetizarse que la variabilidad hidroclimática de la región ubicada al este y norte de la Diagonal Árida (DA), está relacionada con la actividad del Sistema Monzónico Sudamericano, mientras que, el balance hídrico de las regiones ubicadas al oeste y sur de la DA está regulado por la actividad de la faja de los Vientos del Oeste o Westerlies (Garreaud et al., 2009). Numerosos estudios indican que la actividad del Sistema Monzónico Sudamericano y de la faja de los Vientos del Oeste ha variado a diferentes escalas temporales y espaciales. Un importante número de sistemas lacustres contienen excelentes registros paleolimnológicos que permiten reconstruir la variabilidad ambiental ocurrida desde el Tardíglacial hasta el Antropoceno en el área comprendida entre la planicie uruguaya y el centro-oeste y noroeste de Argentina incluyendo la región Pampeana Argentina, Puna Austral y Cordillera Oriental. (González y Maidana, 1998; Valero-Garces et al., 2003; García Rodríguez et al., 2009; Piovano et al., 2009; Rojo, 2009; Stutz et al., 2012; del Puerto et al., 2013; Córdoba et al., en prensa; Guerra et al., en prensa;) El análisis de multi-indicadores de testigos sedimentarios datados (14C AMS y 210Pb) permitió efectuar reconstrucciones hidroclimáticas representativas de un gran sector de la región pampeana y este de Uruguay (Lagunas Mar Chiquita, Melincué, Encadenadas del Oeste de Buenos Aires en Argentina y Laguna Peña en Uruguay). El registro de la laguna Mar Chiquita (Córdoba) indica un largo período de sequía seguido por una fase de mayor humedad a partir de los 13.0 cal ka AP cuya duración aún no ha sido determinada, seguido por un reverso hidrológico con una fase extrema datada en ca. 4,7 cal ka AP. Situaciones de mayor disponibilidad de humedad - entre 1,5 y 1,1 cal ka AP- pueden ser parcialmente asignadas a la Anomalía Climática Medieval (ACM). El primer mileno está pobremente representado y se corresponde con situaciones de déficit hídrico comparables a las reconstruidas para la Pequeña Edad de Hielo (PEH). Similares reconstrucciones cubriendo parte del Holoceno medio y tardío y en particular los eventos climáticos globales asignados a la ACM y PEH pueden identificarse en el registro de las lagunas Melincué (Santa Fe; Guerra, en preparación) y Encadenadas del Oeste de Buenos Aires (Córdoba, 2012). En correspondencia con el período denominado Antropoceno (Curtzen, 2002), los registros paleolimnológicos de los sistemas ubicados al este de la Diagonal Árida indican una disminución en la intensidad de las condiciones de sequías a partir de ca. 1850 AD hasta la década de los años 1970, momento en el que se inicia la situación de balance hídrico positivo. En lo que respecta al este de Uruguay, el registro de Laguna Peña se extiende desde los 2,5 cal ka hasta 2010 AD. El análisis paleolimnológico permite inferir eventos climáticos asociados a la ACM y PEH (del Puerto et al., 2013) en fase hidrológica a los ocurridos en la región pampeana argentina. Aunque la Salina del Bebedero se encuentra en el centro-oeste de Argentina (bajo influencia del Sistema Monzónico) su conexión pasada con el sistema fluvial del río Desaguadero, controlado por humedad originada en el Océano Pacífico, ha generado escenarios de niveles altos durante la PEH a diferencia de las fases secas características de la región pampeana. Las reconstrucciones se efectuaron en función de la caracterización sedimentológica y bioestratigráfica de sucesiones sedimentarias de unidades lacustres y eólicas en el área de la Salina del Bebedero (González y Maidana, 1998; Chiesa et al., 2010; Ojeda et al., 2013; Tesis doctoral de Eimi Font, en ejecución) y análisis polínicos en testigos (Rojo 2009). El registro sedimentario de la Salina del Bebedero (San Luis) incluye facies lacustres con niveles variables desde el Pleistoceno tardío hasta la PEH, sincrónicos y en fase hidrológica con los registrados en Patagonia norte, región controlada por similares patrones de circulación atmosférica, y que evidencian las mismas fluctuaciones en la faja de los Vientos del Oeste durante el Holoceno. Al comparar las fluctuaciones hidrológicas ocurridas desde el Tardiglacial hasta la actualidad, la región Pampeana presenta un comportamiento antagónico con respecto a otras regiones de Sudamérica (e.g., Puna Chilena, Patagonia). El desarrollo de una fase fría o cálida está asociado a una modificación en el transporte y aporte de humedad definiendo el signo del balance hidrológico regional. Los sistemas lacustres alimentados desde el Pacífico (Patagonia y cuencas con cabeceras en la región Andina como la cuenca del río Desaguadero y su vinculación con las lagunas de Guanacache y salina del Bebedero), muestran niveles comparativamente más altos durante períodos con intensificación de actividad de la faja de Westerlies, como por ejemplo, durante el Holoceno medio o la PEH, Por el contrario, la región Pampeana exhibe fases de mayor humedad durante intervalos cálidos (Holoceno temprano, ACM), la cuales podrían ser el resultado de un Monzón fortalecido que advecta mayor cantidad de humedad hacia el subtrópico. El gran salto hidroclimático registrado a partir de la década de los años 1970 en la región Pampeana no tiene correlato en el registro intrumental de los últimos ca. 100 años, aunque el registro paleolimnológico indica situaciones similares durante la ACM. Este cambio se encuentra claramente preservado en numerosos sistemas lacustres salinos, los cuales constituyen excelentes "marcadores estratigráficos". Es importante remarcar que nuestros resultados indican que las reconstrucciones hidroclimáticas basadas en datos paleolimnológicos permiten analizar la variabilidad con una alta resolución temporal, algo que es difícil de determinar en los ambientes continentales dominado por secuencias aluvio-eólicas.