Malfines y andalgalaes después de las desnaturalizaciones: siguiendo sus huellas en expedientes judiciales

MARISOL GARCÍA

Mar del Plata

Jornada; XVI Jornadas Interescuelas/Departamentos de Historia; 2017

Departamento de Historia y Centros de Estudios Históricos de la Facultad de Humanidades de la Universidad Nacional de Mar del Plata

La conquista española de las tierras altas y valles de la Gobernación del Tucumán se logró en 1665 tras un arduo proceso de luchas y resistencias indígenas que duraron más de 130 años y que resultaron en las desnaturalizaciones, esto es, el traslado forzado de los grupos rebeldes (Lorandi 1988b, Rodríguez 2008). No obstante el proceso de desarticulación llevado adelante por la Corona, la resistencia continuó y las sociedades nativas desplegaron un conjunto de estrategias para atenuar la dominación, entre ellas el acceso a la justicia. El presente trabajo se centra en la encomienda de malfines y andalgalaes ubicada en La Rioja en la estancia de Guaco, durante el periodo de 1674 a 1690. Este caso fue previamenteanalizado por Lorandi y Sosa Miatello(1991). En el artículo, las autoras analizaron el pleito que se generó por las tierras que ocupaban los indígenas luego de la muerte de su encomendero, enfatizando la actuación contradictoria de la justicia, los intereses de los españoles involucrados y la resultante pérdida de la identidad étnica de los malfines y andalgalaes. Retomaré este caso desde otra perspectiva y con un objetivo distinto: centrarme en la disputa entre los caciques de la encomienda. Así, prestaré especial atención a las maniobras discursivas y los argumentos que utilizan tanto ellos como su encomendero para obtener sentencias favorables, enfatizando la agencia indígena en un contexto de dominación colonial.