BECAS
DI GIACOMO Ana LucÍa
congresos y reuniones científicas
Título:
Degradación de zearalenona por cepas de Bacillus degradadoras de aflatoxina B1 aisladas de suelos
Autor/es:
GONZÁLEZ PEREYRA M.L.; DI GIACOMO, A. L.; LARA A.L.; MARTÍNEZ M.P.; CAVAGLIERI L.
Lugar:
Buenos Aires
Reunión:
Congreso; XV Congreso Argentino de Microbiología (CAM); 2019
Institución organizadora:
Asociación Argentina de Microbiología
Resumen:
La contaminación de productos agrícolas y alimentos balanceados con micotoxinas es un problema que afecta a la salud pública y economía a escala mundial. Zearalenona (ZEA) es un micotoxina estrogénica, producida por {Fusarium} spp., que causa desórdenes reproductivos en animales. La estrategia de detoxificación más común involucra métodos químicos de alto costo y escasa eficiencia. Aflatoxina B_1 (AFB_1) y ZEA poseen en su estructura un anillo lactona. En estudios previos se aislaron cepas de {Bacillus subtilis, B. mojavensis} y {B. cereus} capaces de degradar AFB_1 (González Pereyra et al., 2019). El objetivo del presente trabajo fue probar la capacidad de estas 11 cepas para degradar ZEA mediante metabolitos extracelulares y estudiar la toxicidad de sus productos de degradación. Se realizó un ensayo según la metodología de Iram et al. (2015) colocando en microtubos 250 µl de sobrenadante libre de células (SNLC) de cultivos de cada cepa de {Bacillus} + 50 µl de una solución de ZEA (2500 ng/ml). En los tubos controles se colocaron 250 µl de caldo sin inocular + 50 µl de la solución de toxina. Se incubaron a 30°C por 24, 48 y 72 h y se analizó la concentración de ZEA por HPLC según Cerveró et al. (2007). Se calculó la cantidad de toxinas residual en cada muestra mediante la confección de una curva de calibración y se calculó el % de degradación para cada tratamiento comparando con los controles. Se realizó un análisis por TLC comparando los productos de degradación con estándares de ZEA. Se realizó el test de {Artemia salina} para realizar un screening de las cepas que degradasen ZEA a compuestos menos tóxicos. Se observó que la degradación de ZEA no fue estadísticamente significativa (P