BECAS
MALPARTIDA MONTIVERO Francisco Emmanuel
congresos y reuniones científicas
Título:
El II° Congreso Pedagógico Nacional en Tucumán y el debate pedagógico - político de la posdictadura
Autor/es:
MALPARTIDA MONTIVERO, FRANCISCO EMMANUEL
Lugar:
Tucumán
Reunión:
Congreso; Congreso Internacional de Educación y Política en el camino hacia un nuevo humanismo; 2019
Institución organizadora:
Facultad de Filosofía y Letras - UNT
Resumen:
Una de las medidas más importantes por su impacto en la configuración del horizonte pedagógico en la educación nacional fue el llamado a la organización del II Congreso Pedagógico Nacional, coincidente con los cien años de la convocatoria anterior que consolidó las bases de la educación común. A través de una ley sancionada por el Poder Legislativo Nacional , el alfonsinismo promovió la organización del Congreso con fines deliberativos y el establecimiento de líneas programáticas en el área educativa. Los objetivos de construir consensos a partir del debate plural sobre la educación, convocaba a que el desarrollo del Congreso sea mediante instancias territoriales con diferentes grados de representación y decisión, que dispuso la normativa: a) el país en su conjunto, como instancia territorial que comprendía a La Comisión Organizadora Nacional y a la Asamblea Pedagógica Nacional ; b) las jurisdicciones, es decir provincias y distritos territoriales, comprendía a las Comisiones Organizadores Jurisdiccionales y a las Asambleas Pedagógicas Jurisdiccionales; y c) unidades territoriales menores que comprendían a las Juntas Promotoras, las Comisiones Organizadoras Locales y las Asambleas Pedagógicas de Base. La convocatoria en Tucumán inició su trámite administrativo, una vez que se constituyó en una ley provincial que disponga recursos técnicos y económicos para las necesidades organizativas del CPN; adhiriéndose en septiembre de 1986 a las disposiciones de la Ley N° 23.114 (Diario de Sesiones ? Año 1986, pp. 1.428). La formación de las comisiones de trabajo del CPN estuvieron caracterizadas por la amplitud de los sectores representados, sin que esto signifique la primacía ideológica ? política sobre los asuntos educativos de una fracción social por sobre otra. Tal como planteaba la ley, la Comisión Organizadora Jurisdiccional se compuso por autoridades gubernamentales, representantes del poder legislativo, asociaciones profesionales, instituciones educativas, representantes sindicales y organizaciones de la Sociedad Civil, que conformaron además la Comisión Honoraria del CPN. El desarrollo del evento involucraba a los equipos técnicos de la Secretaría de Estado de Educación y Cultura que fueron adscriptos a las tareas de recolección de datos y elaboración documental de los debates del Congreso y los respectivos trabajos en Comisiones, que debían ser respetadas de acuerdo a lo expuesto por la norma nacional. Ahora bien, el Congreso Pedagógico Nacional representa el momento de constitución orgánica del bloque subsidiarista de la educación nacional y la incipiente derrota de aquellos sectores que promovieron el desarrollo de un debate plural y democrático. Para ello es necesario entender al CPN como vehículo instrumental de la estrategia alfonsinista, en pugna por la democratización de los escleróticos espacios sociales, y cuya iniciativa de trabajo mantuvo los tintes del discurso radical de la posdictadura. En este sentido, la coincidencia programática con la CTERA resultaba fructífera dada las fluctuaciones hegemónicas que había asumido la central docente, sobre todo con la preeminencia de la figura de Alfredo Bravo (histórico dirigente socialista) y Wenceslao Arizcuren (dirigente radical de la provincia de Río Negro), y permitía subordinar a los sectores radicalizados y peronistas, a la iniciativa articulatoria del oficialismo nacional con la agenda sindical docente . Sin embargo, el CPN visibiliza la trama de organicidad y articulación de aquellos sectores que, a simple vista, parecían fragmentados luego de la Dictadura. Adriana Puiggrós sostiene que, ?la Iglesia Católica participó organizadamente disputando a los sectores laicistas cada espacio?, y pusieron en evidencia la fuerza que habían cobrado aquellos sectores más oscurantista ligados a la figura de Juan Rafael Llerena Amadeo y el sector privado confesional. Poco antes de su realización, el periódico CONDUSEC, histórica tribuna intelectual del bloque confesional-subsidiario había inaugurado una sección exclusiva sobre el Congreso Pedagógico, desde la cual se alentaba a los docentes cercanos a sus posiciones político ? pedagógicas a participar activamente. Una vez elegida la Asamblea Nacional, dentro de los 300 delegados de todo el país, se identificaban ?un 33% de delegados católicos independientes, 27% de delegados identificados como justicialistas, aunque próximos a nuestra propuesta un 22% identificados como radicales y un 8% identificado con partidos de izquierda? , entre quienes se encontraban a ex funcionarios como Alfredo Van Gelderen (primer director nacional del Servicio Nacional de Enseñanza Privada y vicepresidente del Consejo Nacional de Educación durante el ?onganiato?); Marcos Ronchino (representante del Opus Dei y ex Director Nacional del SNEP en 1964) y el mismo, Llerena Amadeo . En Tucumán, el desarrollo del CPN asumió contornos similares a los diagnósticos de la instancia territorial federal. Probablemente, y como fue señalado anteriormente, la alianza social del peronismo vernáculo con la Iglesia Católica en la posdictadura encuentren entre los antecedentes las posiciones gubernamentales asumidas frente al proyecto del divorcio vincular, y que sirvió como momento de consolidación política de aquellos sectores enfrentados a una medida considerada como ?destructora de la unidad básica de la familia y ajena a la tradición nacional?. En este sentido, la preeminencia de sectores afiliados al catolicismo provincial en las Comisiones de Trabajo pone de relieve la correlación de fuerzas sociales en la construcción de las definiciones pedagógicas del Congreso. Al mismo tiempo, demostró la carencia de articulación y apertura hegemónica de los sectores laicistas y democráticos frente al auge del discurso subsidiario y confesional, que mostraba características organizativas y homogéneas en su interior, provocando así la ruptura y abandono del debate dentro del propio Congreso, con aquellos sectores que no habían sido suficientemente representados como el sindicalismo, las vertientes progresistas del catolicismo y del justicialismo .Si bien las resoluciones del CPN no adquirieron una tonalidad formal propia de las políticas educativas sí construyeron los contornos de un escenario político y pedagógico real, sobre todo, la construcción horizonte de subsidiariedad estatal en asuntos educativos. En ese sentido, esta ponencia se propone construir las particularidades provinciales de este acontecimiento pedagógico y su impacto en el campo político e intelectual de la educación.