El cuerpo como lazo originario: depedencia y vulnerabilidad en Butler

CAMILA SECCO

SANTIAGO DE CHILE Y VALPARAÍSO

Congreso; IV CONGRESO LATINOAMERICANO DE TEORIA SOCIAL; 2023

GRUPO DE ESTUDIO SOBRE ESTRUCURALISMO Y POSESTRUCTURALISMO, INST. DE INVG GINO GERMANI, FAC DE CS SOC, UBA

Existe un lazo originario con un otro. Ese lazo nos es dado por poseer un cuerpo, uncuerpo social, por el que existimos fuera de nosotros y para otros. Así lo propone JudithButler (2006), y de ello desprende los fundamentos para una ética de la no violencia apartir de la precariedad y vulnerabilidad que acompañan nuestra vida corporal. Lavulnerabilidad sin embargo está sujeta a una distribución diferencial de la violencia queabre una brecha entre precariedad (precarity) y precaridad (precariousness) (Butler,2009); se entreteje así un biopoder que a desde la lógica del hacer vivir y dejar morirconfigura los cuerpos en vivibles y no vivibles, en duelables y no duelables.La ética de no violencia que propone Butler no es ausencia de violencia sino más bien uncompromiso y la reorientación de la agresión (Butler, 2020). Y de lo que se trata es derecobrar la noción de cuerpo como un punto de anclaje del vínculo con un otro. Con estointento orientar la reflexión en torno a las falacias individualistas que envilecen el lugarde la otredad al interior de una libertad omnipotente; pues allí donde es común destacarun individualismo hay más bien formas de dominación, sometimiento, exclusión de unotro dentro de las propias relaciones intersubjetivas; cuyo figura mentora es un individuo(hombre, adulto, blanco, hetero) sobrecargado de poderes quiméricos ajeno a los lazossociales y que es la medida eficaz desde la que se configuran las relaciones sociales ennuestra comunidad política hoy. Esto marca nuestra época como signo de un sistema queescamotea los vínculos de solidaridad y acota los límites de reconocibilidad posibles.Persistir en los intentos de incorporar a un otro, de incorporarnos en interdependencia,como se puede leer en la ética de la no violencia de Butler, es recobrar la posibilidad deencontrar modos de sociabilidad fundamentales que configuran nuestra vida socialmarcada por un cuerpo que nos expone ya siempre a un afuera. Porque entiendo que unaética que se empeñe en revitalizar una mutua dependencia con valor normativo habilitauna desmitificación de ese individualismo dominante que embandera la idea moderna delibertad. A la vez que es un modo de expandir los márgenes de lo reconocible y de lazosafectivos que nos une en comunidad desde esa condición que nos acompaña a todos: unaradical dependencia. Lograr desmitificar una autonomía con connotacionesindividualistas como el autogobierno del hombre adulto e independiente, inclusoautosuficiente para pensar una teoría social donde los lazos sociales sean la prioridad.Pensando en el marco de una ética de la no violencia que parte de la agresión comocomponente latente en todo vínculo humano y del error de buscar su represión comosolución ante las experiencias de violencia proponemos: primero, enmarcar la discusiónen torno al problema de la libertad y la necesidad de poner en la base misma de esta esoque nos mantiene inexorablemente unidos, desde un ser y estar corporal en el mundo; conlo que se propone a su vez pensar posibles lecturas biopolíticas del cuerpo, donde esteconstituye un espacio que habilite la ruptura con lógicas de dominación y sujeción. Y,segundo, ahondar en esos elementos que componen la idea de cuerpo en Butler,primordialmente, la tríada que aquí destacamos “cuerpo-pérdida-duelo” que evidencianla necesidad ético-política de reconocer y asumir nuestra dependencia y vulnerabilidad.De ello concluiremos que, tal y como leemos en Butler, el cuerpo, en tanto es ese lazoelemental que nos expone ya desde siempre ante un otro, evidencia la falacia delimaginario individualistas de libertad como independencia y autosuficiente a partir de unadependencia que no se puede borrar; y, a su vez, el cuerpo posee un potencialontologizante que se evidencia en la experiencia común de la perdida y el duelo que puedeabrir los horizontes en los que se reconoce a un otro. Lo cual puede ser la instancia desocavar la idea de libertad con un punto de partida individual hacían una que tenga comolugar de arranque una sociabilidad constitutiva.En los tiempos que corren, de un neoliberalismo prepotente que juega con vendernos elideal de autonomía a costas de una precariedad marcada por el ritmo del mercado ¿cómonos es posible pensar hoy los lazos entre sujetos en la comunidad política en que vivimos?Y si asumimos como Butler lo inevitable de la violencia ¿Cómo implicamos en nuestraacción libre, y sus repercusiones, la vida de otras/os? ¿Qué responsabilidad mutuatenemos en nuestros actos de libertad? o mejor ¿en qué consiste esa dependencia quedelinea la base para una idea de independencia con que vivimos y actuamos, con la queconcebimos nuestra libertad?