BECAS
MONTESERIN HÉctor Eduardo
congresos y reuniones científicas
Título:
Acerca de la responsabilidad en-común. Influencia de Nietzsche en el debate en torno a la comunidad
Autor/es:
MONTESERIN, HÉCTOR EDUARDO
Lugar:
Tucumán
Reunión:
Congreso; XIV Congreso Nacional de Filosofía; 2007
Institución organizadora:
Asociación Filosófica Argentina
Resumen:
El hilo conductor del presente trabajo es la pregunta por el gesto, común a los autores con los que aquí entraremos en dialogo, Nancy, Derrida, Esposito y Blanchot, de seguir hablando o de volver a hablar de ?comunidad?. Buscamos demorarnos en la interrogación acerca del porqué de esa insistencia en el uso de un término tan equívoco, al punto que ha podido significar tanto aquello que expropia a los sujetos de la identidad consigo mismos (Bataille), como aquella unidad sustancial en el seno de la cual tiene lugar su mas pura fusión (representación mítica de comunidad); que ha podido constituirse en el pasado siglo, tanto como término-emblema de otra humanidad por alcanzar (comunismo), como de la más extrema empresa de muerte (nazismo).Todo llevaría, dada la facilidad con que este término reenvía a connotaciones e interpretaciones equivocadas de lo que se quiere tratar, a abandonarlo. Sin embargo se insiste en su uso a la vez que se interroga por la necesidad y el deber de hacerlo. Esta insistencia, y con ello adelanto la tesis del trabajo, hay que entenderla a la luz de una interrogación, problematización y asunción de un principio de responsabilidad, entendida como responsabilidad-en-común, que instaura el deber de responder, por un lado, ante lo aconteciente, y por otro, el deber de responder a los otros siempre vinientes, inesperados e inapropiables. Claro que esta distinción, como bien señalará Derrida, del ante qué o quién se responde, no deja de ser esquemática en algún sentido, y lo que ocurre es siempre una contaminación de la una en la otra. Por lo pronto, dejemos ya asentado que comparten el mismo principio de responsabilidad que trasciende el presente vivo, y asume que el ante quién o qué permanece inaccesible e inapropiable.Siguiendo de cerca a Derrida y al propio Nietzsche, encontramos en el filósofo del quizá, al heraldo de este principio de responsabilidad, además de un precursor de ese gesto de insistencia sobre la utilización de un término que parecía abandonado a los prejuicios de una asignación fija. Por lo tanto, se trata de recuperar la influencia de Nietzsche no solo en lo que respecta a determinadas temáticas en sí, planteos o interrogaciones, sino también en lo concerniente a cierta estrategia, cierto modo de acción filosófico-política.En uno de los tantos momentos en que la escritura nietzscheana adopta el modo del manifiesto, del anuncio de lo que se es, a propósito de la figura afirmativa de espíritu libre, nietzsche hará referencia a la responsabilidad mas amplia de todas. Será ésta la responsabilidad de llamar y responder a los venideros, a los filósofos por venir. Nietzsche se asumirá como responsable solamente en tanto disipe y aleje los prejuicios y malos entendidos que cubren el concepto de espíritu libre. La omisión de esta respuesta a los filósofos del porvenir sería irresponsabilidad. Es ésta, la amplitud de la responsabilidad del espíritu libre. Amplitud que comparte con el pensar en torno a la comunidad.