INVESTIGADORES
TAPIA SILVA Felipe Fernando
congresos y reuniones científicas
Título:
GEOLOGÍA Y MODELADO CINEMÁTICO-ESTRUCTURAL DEL SECTOR ORIENTAL DE LA FAJA PLEGADA Y CORRIDA DE MALARGÜE
Autor/es:
LOPASSO, AILIN; TAPIA, FELIPE; GHIGLIONE, MATÍAS
Reunión:
Congreso; XXI Congreso Geológico Argentino; 2022
Resumen:
La faja plegada y corrida de Malargüe corresponde a una las zonas de deformación que caracterizanla vertiente oriental de los Andes Centrales del sur entre 34º y 37ºS. El techo de cuña y el frente de deformación de la faja se encuentran cubiertos por una espesa cobertura de depósitos sinorogénicos neógenos ycuaternarios, que nos permitieron entender la evolución y relación entre los últimos estadios de deformacióny la sedimentación dentro del sistema de orógeno y antepaís mediante un modelado cinemático-estructural.Para abordar esta problemática, se realizó una caracterización geológica y estructural de campo, en laregión ubicada en las inmediaciones de la ciudad de Malargüe y la Reserva Natural de Castillos de Pincheira.El área se encuentra dentro de la parte oriental de la Cordillera Principal (Yrigoyen 1972), limitada al estepor el antepaís fragmentado producto del desarrollo del bloque de San Rafael (Ramos y Kay 2006). Para lacaracterización y modelado estructural, se sumó información de subsuelo recabada a partir de seccionessísmicas 2D al este de la Malargüe.La estratigrafía se caracteriza por basamento paleozoico, del Grupo Choiyoi, seguido por depósitosdel Ciclo Precuyano (sinrift). Continúa una cobertura sedimentaria del Mesozoico - Paleógeno que constituyeel relleno de la Cuenca Neuquina en facies de enfriamiento térmico (sag) a cuenca de antepaís, correspondientes a los Grupos Cuyo, Mendoza, Rayoso, Neuquén y Malargüe. La secuencia culmina con las unidadesvolcaniclásticas y sedimentarias depositadas durante el Neógeno - Cuaternario.Desde un punto de vista regional, la faja plegada y corrida de Malargüe, se defi ne como una fajaplegada y corrida de piel mixta desarrollada en un pulso de deformación mioceno, con propuestas de unaetapa compresiva previa durante el Cretácico Tardío (Fennell et al. 2015). Dentro de este contexto, sedefi nieron dos dominios estructurales (Fig. 1A): uno de piel fi na en el sector occidental, con dos superfi ciesde despegue vinculadas a un sistema de dúplex y a la generación de pliegues intracutáneos; y un dominiode basamento hacia el este, asociado a niveles de despegue profundos. A partir de los análisis realizados,se propone una estructuración en dos pulsos de deformación asociados a un régimen tectónico compresivo,el primero durante el Cretácico Tardío seguido de otro pulso durante el Mioceno tardío - Plioceno. Cabeseñalar que, en base a nuestros análisis, solo se lograron reconocer evidencias indirectas que indicarían laexistencia de un pulso compresivo previo al Mioceno, quizás asociado a la fase del Cretácico Tardío defi nidopor Fennell et al. (2015).En el límite entre el dominio de piel fi na y piel gruesa del área de estudio, se reconocieron discordancias progresivas en depósitos informalmente denominados como ?Estratos de Bombilla?, y asignadostentativamente al Mioceno - Pleistoceno.Los modelados cinemáticos fueron realizados con una metodología en secuencia (forward) para representar la evolución y el crecimiento de las estructuras más orientales de la región: los anticlinales Malargüe(Fig. 1B) y Chacay, desarrollados durante el Mioceno. Se cuantifi có la deformación y sedimentación en la zonamediante el cálculo de tasas de acortamiento y acumulación para dichas estructuras. Para ello, se utilizócomo punto de control el análisis de horizontes sísmicos y los datos tomados en superfi cie sobre la traza delas líneas sísmicas. De esta forma se pudo identifi car la presencia de tres ciclos agradacionales refl ejadosen los estratos de sincrecimiento y asociadas a las diferentes etapas de crecimiento de los anticlinales,pudiendo establecer la evolución de los mismos. Por medio de una correlación con las secuencias defi nidaspor Silvestro y Kraemer (2005) a la latitud de estudio se pudo cuantifi car el tiempo en que se desarrollaronambas estructuras en 4,2 ± 0,9 Ma (Mioceno tardío-Pleistoceno). Las tasas de deformación y sedimentaciónfueron estimadas en 1190 ± 255 m/Ma y 238 ± 51 m/Ma para el anticlinal Malargüe y de 476 ± 102 m/Ma y157 ± 34 m/Ma para el anticlinal Chacay.Al comparar los mismos parámetros con los obtenidos para la cuenca intramontana miocena de Pincheira(Silvestro y Kraemer 2005) ubicada en la porción este del área de estudio, se puede observar que habríahabido un aumento en las tasas de sedimentación durante los estadios de estructuración más recientes dela faja plegada y corrida, mientras que las tasas de deformación no habrían cambiado signifi cativamente.Trabajos previos han reconocido que, a la latitud de estudio y de forma contemporánea a la deformacióny sedimentación de los mencionados anticlinales, se produjo un alzamiento y deformación en el sector occidental del orógeno (Farías et al. 2008, Tapia et al. 2015), lo que favorecería la erosión del orógenodando lugar a una mayor disponibilidad de sedimentos que se acumularían en la cuenca de antepaís, y locual explicaría el aumento en las tasas de sedimentación a partir del Mioceno tardío a pesar de no observarun aumento considerable en las tasas de deformación.