La reivindicación de la nación en el pensamiento de José Carlos Mariátegui y John William Cooke

JOSÉ ANDRÉS CARBEL OLIVERA

Córdoba

Simposio; I Simposio de Filosofía Latinoamericana Contemporánea y VII Jornadas Regionales Intercátedras de Pensamiento Latinoamericano; 2015

Centro de Investigaciones ?María Saleme de Burnichón? FFyH UNC / Cátedra de ?Filosofía Argentina y Latinoamericana? de la Escuela de Filosofía. Facultad de Filosofía y Humanidades, Universidad Nacional de Córdoba

La tradición marxista en América Latina ha estado atravesada por grandes debates acerca de cómo interpretar la realidad de nuestros países y cómo intervenir dentro de esta realidad hacia una perspectiva socialista. En el marco de esos debates, el lugar asignado a lo nacional ha sido un tema de debate particularmente espinoso. Me interesa poner en diálogo a dos importantes autores y dirigentes políticos que trabajan esta cuestión con una perspectiva común: Mariátegui y Cooke. Se puede detectar en ambos una reivindicación de lo nacional con rasgos particulares. Tanto uno como otro, distinguen la función que cumple el nacionalismo en las naciones imperiales y aquellas dominadas por el imperialismo. De esta manera, llegan a la conclusión de que el nacionalismo puede ser un elemento revolucionario en la construcción política, a la vez que reconocen su faceta reaccionaria.A partir de esa lectura, realizan una disputa de sentido acerca de qué es lo nacional: La nación como obra de las masas oprimidas y explotadas; la nación heredera de una historia de resistencia, plebeya, y no legado colonial; la nación como proyecto antes que como pasado a restaurar. Trabajan a favor de la construcción de una nueva patria, una patria para las masas indígenas, campesinas y obreras. Finalmente, una patria que reniega de aquel culto a la tradición e incorpora para sí ideas extranjeras, en la medida en que funcionan como palancas para la transformación social.La incorporación del horizonte socialista como aquella utopía que orienta estratégicamente la construcción de nuestras naciones, a la vez que permite analizar económica y políticamente su conformación, enriquece sus planteos. Mariátegui detecta el problema de la nación peruana en el régimen de propiedad de la tierra y plantea su superación a través de la organización del campesinado indígena. Por su parte, el marxismo permite a Cooke avanzar en un análisis del desarrollo de las clases sociales en Argentina que esclarece en buena medida los procesos de organización política de la historia reciente a la vez que aporta elementos para pensar una estrategia revolucionaria para el país.En la ponencia abordaré todos estos elementos para profundizar en ellos, a la vez que buscar similitudes y puntos de diferenciación entre ambos autores. Pretendo así abonar a la construcción de un marxismo lationamericano, es decir, de un marxismo con los pies metidos en el barro de la historia de nuestro continente. Considero que la nación ocupa un lugar central en esta tarea, en la medida en que permite pensar la necesaria confluencia de las corrientes nacionalistas y socialistas en un mismo horizonte de cambio social para nuestros pueblos.