Del activismo a la academia: el devenir de las prácticas manicomiales como categoría política local

BENJAMÍN AZAR BON

San Miguel de Tucumán

Congreso; III Congreso Argentino sobre Problemáticas Actuales en Salud Mental; 2023

Universidad Nacional de Tucumán

Existe un firme consenso en que a partir de los primeros años de la década del 2000 las políticas vinculadas a la salud mental desde una perspectiva de derecho se posicionaron con fuerza en la agenda política argentina (Faraone & Barcala, 2020). La importancia que habían adquirido los organismos de derechos humanos, relacionados con la resistencia y el pedido de justicia durante la última dictadura cívico-militar, favoreció la visibilización de violaciones de derechos en el campo de la salud mental. Este impulso renovado del activismo en derechos humanos posibilitó la sanción en 2010 de la Ley Nacional de Salud Mental N° 26.657. De esta manera, y a diferencia de experiencias anteriores que –más allá de su innegable importancia- no pudieron trascender los límites de servicios o sistemas de salud provinciales, la Ley de Salud Mental se presentó como la consolidación de un proceso nacional que tenía a los movimientos activistas como actores clave. Con sus propias características, la academia no se vio ajena al movimiento producido en el campo del activismo. Si bien las relaciones entre los espacios políticos y los centros de formación profesional se caracterizan por ser multidireccionales y complejas, fue notable como los sectores activistas impregnaron el campo académico. La sanción en 2010 de la Ley Nacional de Salud Mental consolidó en Argentina un proceso que tuvo como protagonistas a movimientos activistas en derechos humanos. Por su parte, y con característica propias, la academia no se vio ajena a este renovado interés, lo que se expresó en numerosas producciones en esa dirección. Entre ellas interesan, en función del objeto de este trabajo, aquellas que mencionan el término práctica manicomial, en cuanto el mismo se encuentra ampliamente difundido en el circuito académico, mas no así trabajado conceptual y metodológicamente en similares proporciones. De acuerdo al rastreo que se realizó para este trabajo, se encontraron 74 producciones entre artículos en revistas científicas, libros, ensayos, ponencias y tesis de grado y posgrado en idioma español y portugués en los que se menciona, al menos una vez, el término práctica manicomial o prácticas manicomiales (en portugués práticas manicomiais).A pesar de la difusión de la noción práctica manicomial, en ninguna de las producciones académicas en las que es mencionado se la define o vincula a un autor que la haya conceptualizado con anterioridad. Por el contrario, la única aproximación a una conceptualización pertenece al ámbito del activismo en derechos humanos.Pese a la falta de definición rigurosa de las prácticas manicomiales, no debe desconocerse el estrecho vínculo que esta noción guarda con otros conceptos que sí han sido trabajados en profundidad. Tal es el caso de la categoría Violencia Institucional que, a pesar de haber surgido –al igual que práctica manicomial- en el ámbito del activismo, fue objeto de numerosos trabajos académicos que resultaron en conceptualizaciones más o menos precisas. El objetivo de este trabajo será hacer una primera aproximación teórica de la noción práctica manicomial intentando detectar algunas de sus características centrales. Asimismo, se planteará si las prácticas manicomiales pueden ser pensadas como un tipo específico de Violencia Institucional y qué tensiones se hallan al plantearlas de este modo.