Sanaciones carismáticas: eficacia terapéutica católica. Entre la discontinuidad mistérica y la expectativa continua de salud.

PABLO COSSO

Salta

Jornada; VI Jornadas sobre Poder y Religión; 2015

ICSOH/CONICET y Facultad de Humanidades/UNSa.

Las intenciones del presente artículo son más bien analíticas derivadas de un trabajo de campo previo (2011-1014) desarrollado en la ciudad de Salta con personas vinculadas al movimiento religioso de la Renovación Carismática Católica. Se presenta una descripción, a través de una selección de casos relatados por interlocutores y registros de observación participante en rituales carismáticos, como pisos empíricos para poder comprender sus instancias terapéuticas generadoras de salud física, psíquica, y espiritual. Cuando hablamos -siguiendo el término nativo- de "sanación", lo tomaremos como un signo de "eficacia terapéutica" (Favret Saada, 2005 y Csordas, 2008), no tanto como conclusión terapéutica sino, más bien, como un estadio posible dentro de un proceso terapéutico (Csordas, Ibídem) al interior de una religión excesivamente "desmagizada" (Prandi, 1992). Casos como los descriptos, interpelan ese imaginario racional y burocrático promovido por las jerarquías eclesiales, apelando a parámetros mágicos, místicos, psicológicos y performáticos. Algo importante a destacar es que la relación entre quienes generan estas "afectaciones" o "afectos" y quienes son afectados (Favret Saada, Ibídem) por las mismas, están insertos en un mismo horizonte de espiritualidad y religiosidad: la recepción de las "gracias divinas" o "dones del Espíritu Santo". De allí se deriva la existencia de "tecnologías del espíritu" (Mancini, 2008) reproducidas en rituales y situaciones particulares: gestos, invocaciones, videncias/visiones, cantos, corporalidades y performances específicas, a los fines de generar o recibir esa "afectación". Resta por decir que el subtítulo del artículo remarca una intención crítica respecto al marco jurídico que la institución eclesial ejerce en torno al ordenamiento racional de los milagros como instancias mistéricas reguladas por su carácter discontinuo. En contraposición se postula una expectativa continua aceptada por los carismáticos católicos: se sabe lo que se hace y se espera que algo suceda o se transforme. El milagro, adquiere de esta manera, otra retórica y otra práctica ("ortoprácticas", según Mancini, Ibídem) frente a la visión institucional hegemónica. Asimismo esa expectativa continua involucra la presencia de una "psicoterapia ritual" (Csordas, Ibídem) o de una "transformación espiritual y sicológica" (Aldunate, 1991) ampliando el sentido de lo religioso hacia la satisfacción de necesidades psicológicas.