BECAS
ARRIETA Marina SofÍa
congresos y reuniones científicas
Título:
La herencia migrada: trayectorias de mujeres migrantes peruanas en Córdoba en los trabajos de cuidado comunitario
Autor/es:
MARINA SOFIA ARRIETA
Lugar:
CÓRDOBA
Reunión:
Congreso; 6º Congreso Género y Sociedad: Desplazar los centros: cuerpos, territorios y saberes en Nuestramerica; 2022
Resumen:
El presente trabajo tiene como objetivo analizar y caracterizar la transmisión generacional y familiar de los trabajos de cuidado comunitario que tiene como protagonistas a las mujeres migrantes peruanas en la ciudad de Córdoba, sus madres en Perú y sus hijas, en algunos casos nacidas en Argentina. Teniendo en cuenta la centralidad de este tipo de trabajos en las ocupaciones de las migrantes regionales, la intención es trazar el recorrido intrafamiliar del cuidado comunitario, como uno de los elementos que persiste y se reconfigura desde el origen. Posicionándonos desde la propuesta teórica de la economía feminista, entendemos que el cuidado no es simplemente una disposición o una ética, sino que se trata ante todo de un trabajo (Molinier, 2018: 187). Vinculado a esto, el cuidado es considerado en un sentido amplio, es decir, como el conjunto de actividades, remuneradas y no remuneradas, que giran en torno al sostén cotidiano de la vida humana (Vega y Gutiérrez-Rodríguez 2014), incluyendo todas las actividades dirigidas a conservar, continuar o reparar el mundo, para que se pueda vivir en él lo mejor posible (Tronto 1994). En términos teóricos, entendemos lo comunitario como la disposición para poner en ejercicio “la capacidad práctica que tienen las poblaciones para cooperar entre ellas” (Gutiérrez, 2008: 35) en base a “relaciones sociales de compartencia que operan coordinada y/o cooperativamente de forma más o menos estable en el tiempo con objetivos múltiples, buscando la satisfacción de necesidades básicas de la existencia social y por tanto individual” (Gutiérrez y Salazar, 2015: 23). Entre esas necesidades, se destacan la alimentación y el cuidado de los/as niños/as que residen en los barrios donde llevamos adelante nuestra investigación. Tal como sostienen Magliano y Perissinotti (2021), en el desarrollo de estas actividades, las mujeres peruanas ponen en juego las habilidades y los saberes con que cuentan vinculados al cuidado familiar (Magliano y Perissinotti, 2021).Nos valdremos además de los aportes de la perspectiva interseccional, la cual, al disputar la noción de una posición política atada a una forma singular de identidad (por ejemplo, género, etnicidad, raza, clase social, etc.), se asienta en la necesidad de recuperar las experiencias de los grupos subordinados y las relaciones de poder que enfrentan en diversos contextos socio-históricos (Magliano, 2015). Específicamente en el campo de las migraciones internacionales, la interseccionalidad reconoce al género como dimensión central, en intersección con otras clasificaciones como la etnicidad o la clase social, que perpetúan desigualdades. Siguiendo a Magliano y Zenklusen (2021), en los estudios sobre migraciones y género, el cuidado ha recibido una gran atención dada la cantidad de mujeres migrantes que a nivel global se dedican a este sector laboral. En este sentido, los trabajos de cuidado tienen un rol fundamental en la organización y sostenimiento del proyecto migratorio. En línea con lo expuesto, las trayectorias de vida de las mujeres migrantes que protagonizarán esta investigación, están vinculadas a los trabajos de cuidado en todas sus formas: familiar no remunerado, como responsables máximas de las actividades de cuidado en el “hogar”; remunerado, en tanto la gran mayoría se dedica al trabajo doméstico; pero nuestro foco estará puesto en el cuidado comunitario, que desempeñan en su rol de referentes barriales y encargadas de la subsistencia barrial (Magliano y Arrieta, 2021). Así pues, la trama de relaciones que sostienen la vida involucra al mismo tiempo el ámbito familiar y el espacio barrial en su conjunto (Magliano 2018).La estrategia metodológica será de tipo cualitativa combinando, por un lado, un trabajo de campo etnográfico iniciado en 2019 que consistió en observación participante con una prolongada presencia en un comedor comunitario gestionado por mujeres peruanas, situado en un barrio de relegación urbana de la ciudad de Córdoba. Por otro lado, retomaremos las herramientas de la historia oral, llevando adelante una serie de entrevistas en profundidad con estas mujeres. Desde esta perspectiva, es preciso señalar que la reconstrucción de relatos biográficos nos abre la puerta al universo subjetivo a través del cual las protagonistas de estas historias han vivido sus trayectorias de migración, trabajo, organización de los cuidados, expectativas, resistencias. La memoria no es un depósito pasivo de hechos, sino un activo proceso de creación de significados. Así, la utilidad específica de las fuentes orales para el historiador no está tanto en su capacidad para preservar el pasado como en los cambios mismos elaborados por la memoria. Estos cambios revelan el esfuerzo de los narradores por darle un sentido al pasado y una forma a sus vidas y colocan a la entrevista y a la narración en su contexto histórico (Portelli, 1991).