CONICET | Buscador de Institutos y Recursos Humanos

Este trabajo tiene un doble propósito: en primer lugar, describir el desenvolvimiento de tres ciclos de cine de animación japonesa entre los años 2003 y 2009 en la ciudad de Córdoba, Argentina, en el marco de la emergencia de una comunidad de fans local a la que dichos ciclos contribuyeron a dar forma; en una segunda instancia, pretende reflexionar de manera más general sobre el proceso de trazado de redes de relaciones a la luz del papel desempeñado por los cines como lugares de reunión y nodos capaces de posibilitar el desarrollo de sociabilidades. En este sentido, me interesa considerar las interacciones que se producían en las salas de cine en su relación con el circuito más amplio integrado por negocios de venta de cómics y manga -conocidos como ?comiquerías?-, por eventos y reuniones realizadas en parques de la ciudad, y foros online. Tales reflexiones surgen de un intento por pensar en términos de una continuidad entre el cine y los nuevos medios (Manovich, 2005), como también de considerar las sociabilidades juveniles que se estructuran en torno de los consumos y usos de mercancías de la cultura pop a partir de los estudios de la performance y del ritual (Schechner, 2000) y de la idea de mundos sociales elaborada por Becker (2008) para tratar de la organización del trabajo artístico. De esta manera, en esta presentación procuro profundizar en el potencial catalizador del cine para la construcción ritualizada de formas singulares -esto es, locales- de imaginar y volver visible una comunidad. Así, sostengo que ir a ver una película o serie y ser visto por otros en tanto que espectadores u organizadores son prácticas que forman parte del cine como experiencia y en el caso de los ciclos de animación japonesa de Córdoba, se constituyeron en recursos para configurar un mundo social.

enviar mensaje