BECAS
FONZO BOLAÑEZ Claudia Yesica
congresos y reuniones científicas
Título:
LOS MOVIMIENTOS SOCIOTERRITORIALES RURALES EN ARGENTINA EN TIEMPOS DE PANDEMIA
Autor/es:
FONZO BOLAÑEZ, CLAUDIA YÉSICA; JARA, CRISTIAN EMANUEL; JULCA GONZA, EDITHA LISBET; PINTO, LUCAS HENRIQUE
Lugar:
Córdoba
Reunión:
Congreso; XVIII Encuentro de Geografías de América Latina y VIII Congreso Nacional de Geografía de Universidades públicas de la República Argentina : construyendo saberes emancipatorios desde y para América Latin; 2021
Institución organizadora:
Universidad Nacional de Córdoba- Facultad de Filosofía y Humanidades
Resumen:
El contexto de pandemia, provocada por el SARS-CoV-2, y el aislamiento social como acción pre- ventiva para evitar el contagio decretado por la mayoría de los países han impactado de manera di- ferenciada en los territorios. Esto implicó el despliegue de nuevas estrategias a las acciones colectivas protagonizadas por campesinos, indígenas y mujeres.En este trabajo, nos focalizamos en Argentina durante el año 2021. Para ello, se identifican las prin- cipales tensiones territoriales y las estrategias de los movimientos socioterritoriales. La pandemia vino a agravar la situación de los pobladores del campo debido al impacto de las políticas llevadas a cabo durante el gobierno de Mauricio Macri de endeudamiento externo, repliegue del apoyo a la agricul- tura familiar y criminalización de la protesta social.La investigación está en desarrollo y consiste en la recopilación y sistematización de noticias, obteni- das mediante Google Alert desde enero de 2021. Para lo cual se está construyendo una base de datos en cooperación entre la REDE DATALUTA de Unesp-Brasil y el equipo de sociología rural de la UNSE-Argentina. A continuación pasamos a comentar algunos de los resultados construidos.En cuanto a la Patagonia, durante los primeros meses de 2021, se registran diferentes episodios de conflictos. Un ejemplo de ello es la resistencia de los movimientos ambientalistas y pueblos origina- rios al accionar de la megaminería en Chubut, donde se promovía una reforma legal para habilitar la actividad a gran escala, pese a la histórica lucha de la ciudadanía contra esta actividad. El repertorio de iniciativas incluye desde estrategias judiciales, visibilización del conflicto en los medios de comunica- ción y redes sociales, hasta trabajos en los territorios como ser asambleas anti-megaminería, verdurazos y donación de alimentos en comunidades afectadas. Igualmente, la provincia de Neuquén ha sido escenario de conflictos por tierras. Los Mapuches resisten al desalojo de sus territorios y demandan del estado no solo que se amplíe la vigencia de la ley 26.160 que suspende los desalojos de pueblosoriginarios, sino que otras comunidades neuquinas, como las que habitan en Vaca Muerta, demandan el reconocimiento como territorio indígena. Por su parte, en la Patagonia se registraron diversos focos de incendios forestales. En este escenario, los Mapuches han sido acusados de provocarlos por parte de dirigentes del macrismo. En este escenario, los movimientos socioterritoriales han incursionado en ac- ciones tales como formación política, ocupación de tierras, resistencia a desalojos y protestas públicas. En la región de Cuyo, el tema reiterado se refiere a demandas estructurales (como el acceso al agua). Las comunidades indígenas Huarpe, que se vieron afectadas por el terremoto acaecido en San Juan, exigen apoyo del estado para reparación y mejoras de infraestructura. Por su parte, el gobierno de Mendoza quitó apoyo estatal a la escuela de agroecología que funcionaba desde 2011 y había per- mitido que muchos adultos rurales terminaran la secundaria. Esto generó el repudio de la Unión de Trabajadores Rurales Sin Tierra (UST).En la región Central se registraron acciones contra fumigación de localidades circundantes a las gran- des explotaciones del agronegocio. Es posible identificar muchas expresiones de acción colectiva con el propósito de visibilizar el trabajo de los productores familiares en transición agroecología y la bús- queda de articulación con los gobiernos para fomentar este tipo de producción. De la misma manera, se torna inteligible la participación de movimientos y organizaciones sociales en la cogestión de po- líticas en relación a los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ONU) y la cuestión de género. Por otra parte, las voces contra proyectos de expansión de la producción de cerdo para el mercado chino, frente a las promesas de ingreso de divisas, tuvo resonancia nacional. Las tomas de tierras y las reacciones del estado se hicieron presente en estos territorios. Asimismo, se registran varias denuncias gestadas por ciertos movimientos socioterritoriales agrarios en torno a las desigualdades profundizadas en cuanto al acceso a la educación y la brecha tecnológica de niños, niñas y jóvenes del campo.En el Noroeste, las noticias dan cuenta del avance del agronegocio y la deforestación a gran escala, pese a las limitaciones de la ley 26.331 de Protección Ambiental de Bosques Nativos. Lo cual se traduce en desalojos de familias campesinas e indígenas. Otras de las noticias se refieren a demandas de comunidades rurales por el acceso al sistema de salud, las tensiones al interior del MOCASE que surgieron luego de las elecciones presidenciales, que culminaron en su posterior división, la incorpo- ración de algunos dirigentes del movimiento como funcionarios públicos y las denuncias por deten- ción y torturas de dirigentes campesinos por la policía de la provincia. En el caso de Jujuy, provincia que continúa gobernada por el macrismo, se registraron diferentes episodios de criminalización de la protesta social. Asimismo, en Salta se agudizaron los reclamos históricos por la falta de acceso a derechos humanos básicos.En la región del Noreste, se visibilizan disputas por políticas públicas relacionadas a promover la co- mercialización de pequeños productores familiares, muchos con cierto grado de capitalización. Cabe aclarar que se trata de una región donde existe, desde los años noventa, una continua expansión de las ferias francas. En el caso de Formosa, se registraron denuncias constantes de comunidades Wichis y organizaciones sociales que las representan, en relación al acceso a la salud y contra la violencia institucional.Finalmente, destacamos que la acción colectiva durante la pandemia no se detuvo, sino se reinventó. Ello pone de manifiesto aspectos estructurales de la cuestión agraria en la Argentina contemporá- nea: concentración de la tierra, neo-extractivismo, desigualdades regionales. Pero también, cuestiones desatadas por la coyuntura sanitaria, como la profundización de inequidades históricas y vulnera- ción de derechos humanos esenciales, para ciertos sectores subalternizados como campesinos, pueblos originarios y mujeres rurales. En efecto, es posible señalar que la hegemonía del agronegocio no es absoluta y hay territorios donde es resistida. Se expresan las tensiones que atraviesan al estado sobrelos modelos de desarrollo rural en disputa. En otras palabras, el modelo de desarrollo basado en el neo-extractivismo tensa al estado, en tanto generaron divisas necesarias para redistribuir recursos para los grupos más vulnerables y los impactos socioambientales que el mismo conlleva.