BECAS
DA PEÑA HAMPARSOMIAN MarÍa Julieta
congresos y reuniones científicas
Título:
Bioactividad in vitro de extractos de Larrea divaricata, sobre el crecimiento miceliar de tres especies de Phytophthora sp. asociadas a la ?rama seca? del olivo
Autor/es:
DA PEÑA, JULIETA; BOITEUX, JOANA; FERNÁNDEZ, M. Á; ESPINO, M
Reunión:
Congreso; I Congreso Interuniversitario I+D+i Mendoza; 2021
Resumen:
En la región oeste de Argentina se ha experimentado un incremento de los valores de precipitación y temperatura media, produciendo una mayor vulnerabilidad de algunos cultivos a las enfermedades. En los últimos años se ha notado una incidencia destacable de enfermedades ocasionadas por patógenos del género Phytophthora, éstos son microorganismos considerados pseudohongos que pertenecen al reino Stramenopila. Este género incluye numerosos patógenos de plantas sumamente destructivos en todo el mundo. Nuestro grupo de trabajo ha logrado asociar mediante diversos estudios realizados en la principal zona de cultivo del olivo en Argentina, el síndrome conocido como ?rama seca? a tres especies de Phytophthora, P. citrophthora, P. nicotianae y P. palmivora. El control de enfermedades mediado por el uso de sustancias químicas de síntesis, ya sea de origen inorgánico u orgánico, es el más empleado. Desafortunadamente, el frecuente mal uso de esta técnica, ya sea por el empleo repetido de principios activos con el mismo modo de acción o de dosis excesivas de estos sumado a la plasticidad adaptativa de los microorganismos, permite una rápida selección de individuos resistentes al agroquímico, disminuyendo su eficacia. La serie de inconveniente planteados y los efectos negativos que estos le ocasionan al ambiente y los seres humanos resultan claves para optimizar la estrategia de manejo fitosanitario a utilizar. Esta última debe responder a técnicas que no ocasionen una disrupción tal en el ecosistema que lo altere negativamente. En este sentido, las técnicas de manejo integrado de enfermedades (MIE) permiten mantener a los organismos dañinos en niveles que no causen daño económico, con el menor efecto negativo sobre el ambiente y la salud humana. El empleo de extractos de plantas puede ser una alternativa ambientalmente aceptable y si, además, los vegetales empleados son autóctonos podría aprovecharse otras de sus cualidades de producir servicios ecosistémicos en nuestro ambiente. El conocimiento sobre la bioactividad de los extractos de plantas la mayoría de las veces es sólo empírico y se desconocen sus propiedades farmacológicas específicas. Los métodos que se emplean para obtener extractos ricos en compuestos potencialmente bioactivos se basan en técnicas convencionales como la maceración, decocción, infusión, entre otras que utilizan grandes volúmenes de solventes, prolongados tiempos de extracción y un gran consumo energético. Debido a esto, surgen metodologías denominadas no convencionales que mejoran algunos de los inconvenientes de las técnicas tradicionales. Entre las primeras se pueden incluir a aquellas que emplean solventes eutécticos naturales (NADES), los cuales están constituidos por mezclas de dos o más compuestos presentes en el metabolismo celular, principalmente azúcares, ácidos orgánicos, aminoácidos y otros que pueden utilizarse como solventes no tóxicos para la extracción de biocompuestos. El objetivo del trabajo fue desarrollar una estrategia ecológicamente sustentable para el manejo integrado de enfermedades ocasionadas por Phytophthora spp. en olivo empleando plaguicidas naturales obtenidos con métodos innovadores de mínimo impacto negativo sobre el medio ambiente y la salud, a partir de plantas autóctonas. El extracto fue obtenido a partir de plantas de L. divaricata cultivadas en invernáculo. Se emplearon dos metodologías de extracción. La primera, denominada método convencional, consistió en adicionar a 10 g de la muestra vegetal liofilizada 200 mL de agua destilada y llevar todo a autoclave a 121°C durante 45 minutos. Luego, se redujo su volumen por calentamiento a 20 mL. Los extractos obtenidos se conservaron en freezer a -20°C hasta su uso. En la segunda metodología, denominada no convencional, se utilizó un solvente eutéctico (LGH) preparado mediante el método de agitación y calentamiento a 80 °C durante 60 min, mezclando ácido láctico y glucosa (5:1) y agua (15%). Para la extracción de biocompuestos de hojas de L. divaricata se colocó el material vegetal liofilizado y molido junto con el solvente bajo estudio en un baño de ultrasonido a 40 °C durante 60 min. Luego, el extracto fue filtrado y centrifugado. Finalmente, los extractos así obtenidos fueron conservados a 4°C hasta su uso. El efecto de los extractos vegetales sobre el crecimiento del micelio de P. citrophthora, P. nicotianae y P. palmivora se determinó haciendo crecer al patógeno en cajas de Petri con un medio de cultivo sólido adicionado con el extracto vegetal a diferentes concentraciones y un testigo. En el caso del método convencional las concentraciones de extracto evaluadas fueron 1%, 2,5%, 5%, 10% y 15%, mientras que para el método no convencional fueron 0,25%, 1% y 2%. Cada tratamiento se realizó por triplicado. Se registró diariamente el área de la colonia, hasta que uno de los tratamientos alcanzó el borde de la caja de Petri. Se calculó luego el porcentaje de inhibición del crecimiento con respecto al testigo. Como resultado de los experimentos se observó que los extractos vegetales obtenidos mediante las dos metodologías fueron capaces de inhibir el crecimiento del micelio de las tres especies de Phytophthora estudiadas. En los tratamientos con el extracto obtenido por el método convencional, la inhibición varió entre el 87 % y el 96 % para las concentraciones de 1 y 2,5%, mientras que alcanzó el 100 % para las concentraciones de 5,10 y 15%. P. palmivora y P. nicotianae no mostraron diferencias significativas en los valores medios de inhibición del crecimiento miceliar, presentando una mayor sensibilidad a los extractos vegetales que P. citrophthora. En cuanto respecta al extracto obtenido por el método no convencional, la inhibición del crecimiento fue total, no se observó crecimiento miceliar en ninguna de las concentraciones estudiadas, para ninguna de las especies. Se puede concluir que los extractos vegetales obtenidos a partir de hojas de L. divaricata resultaron biológicamente activos hacia las tres especies de Phytophthora estudiadas empleando las dos metodologías de extracción propuestas. Dado que la metodología no convencional resulta de un procedimiento menos contaminante y energéticamente más eficiente, es prioritario avanzar con su implementación en futuros trabajos que permitan confirmar estos primeros resultados. Será de sumo interés analizar si el producto obtenido es eficaz también para controlar al patógeno en ensayos in vivo.