BECAS
TABOADA Marianela
congresos y reuniones científicas
Título:
En torno al alcance de la obra de Adán Quiroga: Nuevos registros de los grabados de El Carrizal (Provincia de Tucumán)
Autor/es:
ANA MARÍA DEL VALLE VARGAS; SELENE ARISLUR; CECILIA GENTILE; MARIANELA TABOADA; JAVIER NASTRI
Lugar:
Rosario
Reunión:
Congreso; Primer Congreso Nacional de Arte Rupestre; 2014
Institución organizadora:
Universidad Nacional de Rosario
Resumen:
Petroglifos y pictografías de Calchaquí es un libro íntegramente dedicado al arte rupestre del NOA. Fue editado en 1931 por la Universidad de Tucumán, 27 años después de la muerte de su autor, Adán Quiroga, a la temprana edad de 41 años. Varios contemporáneos ensalzaron el valor de esa obra cuando aún estaba en preparación, en virtud del enorme acopio documental que conllevó: más de 200 paneles, a lo largo de una extensa zona comprendida entre las localidades de Ampajango (Catamarca) en el sur, San Pedro de Colalao (Tucumán) en el este, Diablo pintado (Catamarca) en el oeste y Carahuasi (Salta) en el Norte. Contó con la indispensable ayuda del dibujante Wenceslao Gómez y el trabajo de campo les insumió varias temporadas, fundamentalmente durante los últimos años del siglo XIX. El trabajo mencionado cuenta únicamente con un mapa general de la ubicación de los sitios con arte rupestre, situación que ha dificultado hasta el presente la re-ubicación de los mismos. Esto ha generado una situación de incertidumbre tanto respecto de la veracidad del registro de Gómez como del estado de preservación actual de los paneles publicados por Quiroga. Trabajos recientes en el valle de Santa María han confirmado la conservación de algunos sitios -por lo general ubicados en localizaciones alejadas del uso moderno-, así como también la precisión del registro de Adán Quiroga.En la presente ponencia efectuamos una comparación entre los registros de Quiroga en El Carrizal y nuestros relevamientos recientes en la zona, que incluyen también a la Quebrada de El Carmen, en la provincia de Tucumán. La comparación permite evaluar el ritmo de decadencia de los grabados en los años transcurridos, así como también la precisión del registro (tanto visual como geográfico) de Quiroga y Gómez. Esto último proporciona elementos de juicio para la consideración del potencial y las limitaciones del resto de los escritos que componen la celebrada obra del arqueólogo sanjuanino, estimulando la continuación de los esfuerzos en pos de la ubicación, re-examen y preservación de los aleros y bloques rocosos documentados por el gran precursor de los estudios calchaquíes.