BECAS
ARANCIAGA ROLANDO Alexis Mauro
congresos y reuniones científicas
Título:
Diversidad de Calyptocephalellidae en el Eoceno de Patagonia
Autor/es:
PAULA MUZZOPAPPA; ALEXIS M. ARANCIAGA ROLANDO; FEDERICO L. AGNOLIN
Lugar:
corrientes
Reunión:
Jornada; 32 jornadas argentinas de paleontologia de vertebrados; 2018
Resumen:
Se presentan en este trabajo fósiles de anuros provenientes de las Localidades fosilíferas Río Pichileufú y Río Chacay, de estratos correspondientes a la Fm. Huitrera. La Loc. Río Pichileufú, para la cual se obtuvieron edades 40Ar39Ar de 47 Ma (Wilf et al. 2005), es conocida por su preservación excepcional de restos de megaflora y de artrópodos. El estudio de esta flora, una de las de mayor diversidad y mejor registro a nivel mundial, da cuenta de que esa región (y toda la Patagonia argentina y chilena, a partir del estudio de otras localidades coetáneas) se encontraba cubierta por un bosque tropical húmedo, de temperaturas altas y sin estacionalidad durante el Eoceno temprano/medio (Iglesias et al. 2011).También, que dicho bosque sobrepasaba los confines de la actual Patagonia y se extendía por Antártida y Australia, lugar donde aún persisten especies y géneros ya presentes en el registro fósil. En cuanto a los vertebrados que habitaron esos bosques, para Río Pichileufú sólo se registraron dos especies de anuros: el pípido Llankibatrachus truebae (Báez y Púgener 2003) y el neobatracio Calyptocephalella pichileufensis (Gómez et al 2011); ningún vertebrado es conocido para Río Chacay. La revisión de especímenes en colección indica una gran presencia de anuros en esos bosques. Aquí presentamos algunos de ellos, que se encuentran en proceso de preparación y estudio. A partir de las observaciones preliminares podemos atribuir los restos de estos especímenes al género Calyptocephalella, muy distribuido en la Patagonia durante el Paleógeno y el Neógeno temprano. La atribución responde a la morfología de distintos elementos del cráneo, así como también a elementos postcraneanos. La morfología del maxilar, que presenta áreas de contacto para el nasal, para el escamoso y unamplio contacto con el cuadradoyugal, da muestras de un cráneo con cierto grado de solidez estructural, habitual en este género. La ornamentación de los elementos del cráneo, la morfología dentaria y otros elementos postcraneanos (e.g. húmero, escápula, ilión) es coherente con esta asignación primaria. Si bien no podemos precisar aún la identidad de los materiales, las porciones preservadas de los esqueleto nos muestran dos morfologías bien distintas.El ejemplar de la Loc. Río Pichileufú presenta una anatomía craneana relativamente grácil, similar a la descripta para Calyptocephalella pichileufensis (Gómez et al. 2011), mientras que el ejemplar de la Loc. Río Chacay es más robuto, más acorde con la morfología de la especie Calyptocephalella casamayorensis (Schaeffer 1949), también del Eoceno temprano de Patagonia (ver discusión).Para el Eoceno temprano de Patagonia se conocen dos especies del género Calyptocephalella de dos localidades distantes entre sí: C. pichileufensis, de Río Pichileufú, al oeste de Rio Negro, y C. casamayorensis, descripta a partir de unos pocos restos encontrados en la Loc. Cañadón Hondo, al sur de Chubut. A pesar de no tener las asignaciones taxonómicas definidas, la presencia de dos especies coexistiendo en la misma zona de los bosques es una novedad para el género, para el que hasta el momento sólo una especie por localidad fosilífera fue identificada (curiosamente, el género es monoespecífico en la actualidad). Por otra parte, si se confirmara la presencia de C. casamayorensis en Rio Chacay, estaría ampliándose significativamente la distribución de esta especie, que ocuparía buena parte de la extensión del bosque húmedo que entonces cubría la Patagonia. Estos registros van completando el escenario de dichos bosques pangondwánicos con quienes probablemente fueranparte de los depredadores de sus lagunas y ríos.Cabe destacar que el que aquí se presenta constituye el primer registro de vertebrados para la Loc Río Chacay. La historia evolutiva de Calyptocephalella se vincula a la evolución de estos bosques pangondwánicos; se completa con el conocimiento de que los taxones más cercanamente relacionados ocupan hoy una gran diversidad de ambientes y nichos ecológicos en la región australopapuana,donde dichos bosques se continuaban.