El papel de la Universidad y el compromiso político del investigador en la producción de conocimiento frente a las diversas problemáticas sociales

ESCOSTEGUY, MELISA

San Salvador de Jujuy

Jornada; VII Jornadas de Educación y Diversidad Sociocultural en contextos regionales; 2016

La siguiente presentación surge como continuidad a una reflexión que he venido desarrollando en relación al rol de la etnografía en la actualidad, entendiendo por esta última tanto al proceso que implica la investigación in situ privilegiando siempre el punto de vista local como también al producto generalmente en forma de texto monográfico de dicha investigación (Guber, 2011; Ghasarin, 2008). En este sentido, la práctica etnográfica se ha constituido como el método por excelencia de la antropología para la producción de conocimientos científicamente válidos.El debate en torno al papel de la etnografía se ha vuelto aún más relevante recientemente dado que el objeto de estudio de la antropología se ha trasladado, virando de una "antropología de lo lejano" a una "antropología del presente" o de lo cercano (Blois, 2013; Althabe, 2005), lo cual nos obliga a volver a pensar nuestro lugar como investigadores, ahora atravesados por las problemáticas sociales que estudiamos.El propósito de este trabajo, entonces, es extender dicho debate al plano de la universidad. Esto es, polemizar acerca del compromiso ético y político que deben tener las universidades para con las comunidades en las cuales se encuentran inmersas y a partir de las que se desarrolla la producción del conocimiento científico. Para ello, analizaremos un estudio de caso específico en el cual a partir de la aprobación de un estudio de impacto ambiental y social, puede verse de manera más clara cómo se posicionan políticamente los distintos actores intervinientes (intelectuales, la universidad, la comunidad, el Estado) para cuestionar así cómo, para qué, para quién se llevan adelante las investigaciones. Esto nos permitirá poner en cuestión no sólo algunos conceptos que giran en torno a la idea de la "responsabilidad social" universitaria sino también problematizar la pretendida neutralidad científica (Bourdieu y Wacquant, 1995).