BECAS
NOTARO Ulises SebastiÁn
congresos y reuniones científicas
Título:
Evaluación de la actividad antimicrobiana in vitro de Diclofenac asociado a tulatromicina o cefquinoma frente a Staphylococcus aureus
Autor/es:
CANALIS, M.; GUMIY, D.; NOTARO, U.; PICCO, E.
Reunión:
Encuentro; XVII Encuentro de Jóvenes Investigadores de la UNL; 2013
Resumen:
En las últimas décadas, varios medicamentos antibacterianos han sido desarrollados, y las compañías farmacéuticas han suministrado generación tras generación antibióticos mejorados; sin embargo, el uso masivo, y con frecuencia irracional, durante períodos prolongados ha dado lugar al problema de resistencia. Hoy en día, la presencia de bacterias resistentes sigue su marcha inexorable, por lo que se postula que el descubrimiento de antibióticos más potentes no es la única solución a esta amenaza (Mazumdar et al., 2009). Una alternativa a este problema podría ser el empleo de compuestos ?no antibióticos? existentes en el mercado que poseen propiedades antibacterianas. La aplicación conjunta con fármacos antimicrobianos podría resultar en un mejor efecto en comparación a la aplicación de un antibiótico como agente único, posiblemente debido a que los mecanismos de acción son diferentes (Kristiansen et al., 2007). La búsqueda sistemática entre los fármacos ?no antibióticos? reveló que un agente antiinflamatorio como es el diclofenac (DCF) posee actividad antibacteriana moderada a fuerte frente a bacterias grampositivas y gramnegativas, tanto in vitrocomo in vivo(Annadurai et al., 1998; Dutta et al., 2008). Respecto al posible mecanismo de acción antimicrobiana del DCF, se evidenció que inhibe preferentemente la incorporación de los precursores en [metil-3H] timidina, lo que sugiere que su actividad in vitro frente a Listeria se debe a la inhibición de la síntesis de ADN (Dutta et al., 2008). Si bien la mayoría de los ?no antibióticos? descriptos hasta el momento presentan valores de concentración inhibitoria mínima (CIM) superiores a las se alcanzan en la aplicación clínica, hay que tener en cuenta que muchos de ellos se concentran hasta 100 veces dentro de los macrófagos, quienes en última instancia tienen la capacidad de fagocitar bacterias. Es por ello que la aplicación de un fármaco ?no antibiótico? siguiendo un régimen de dosificación clínicamente aceptable puede resultar en un efecto antimicrobiano in situsimilar al observado in vitro.