BECAS
SOTO Florencia Anabella
congresos y reuniones científicas
Título:
Parámetros de infestación del piojo Antarctophthirus lobodontis (Anoplura: Echinophthiriidae) en focas cangrejeras Lobodon carcinophagus (Carnivora: Phociidae)
Autor/es:
SOTO, FLORENCIA ANABELLA; NEGRETE, JAVIER; LEONARDI, MARIA SOLEDAD
Lugar:
Bahía Blanca
Reunión:
Jornada; XXX Jornadas Argentinas de Mastozoología; 2017
Resumen:
Las focas cangrejeras pasan la mayor parte de sus vidas en banquisas de hielo marino de la región Antártica y pueden observarse congregadas en decenas formando grupos familiares de una hembra, un macho y una cría. Se encuentran parasitadas por el piojo Antarctophthirus lobodontis. Los piojos de esta familia poseen adaptaciones morfológicas, fisiológicas y ecológicas que les permiten sobrevivir al medio marino. Uno de los mayores desafíos que deben afrontar es completar su ciclo de vida en un periodo de tiempo corto, durante la época reproductiva de sus hospedadores. En este contexto nuestro objetivo es estudiar la ecología parasitaria de A. lobodontis en focas cangrejeras en la Costa Danco, Península Antártica. Calculamos la prevalencia (P), intensidad media y abundancia media y comparamos en función del sexo o clase de edad del hospedador y variación interanual. Durante tres campañas consecutivas colectamos piojos de 41 focas: 23 hembras, 16 machos y 2 individuos no determinados, siendo 24 adultos (A) y 17 juveniles (J). La prevalencia fue de 41,5%. No encontramos diferencias significativas entre machos y hembras. En cambio entre juveniles y adultos varió significativamente (PJ=82,4%; PA=12,5%; Test exacto incondicional (p= 0,000)). Registramos variación interanual entre los dos últimos años (P= 33,3% y 90% respectivamente; Test exacto incondicional (p= 0,003)). Las diferencias entre clases de edad responderían a los hábitos de los juveniles que se contagian luego de nacer y sus primeros meses de vida suelen agruparse por largos periodos fuera del agua, facilitando la supervivencia de los piojos. Aunque la prevalencia entre sexos no varió significativamente las hembras están más infestadas que los machos y probablemente al aumentar el N sería significativa. La variación interanual podría deberse a una disminución en la extensión de hielo marino lo que reduciría el espacio disponible haciendo que las focas se concentren más, favoreciendo el contagio.