BECAS
DI CROCE GARAY Andrea
congresos y reuniones científicas
Título:
El papel de la arquitectura en el impulso de la organizacion como estrategia central en la reconstrucción post-inundación en La Plata
Autor/es:
DI CROCE GARAY - DUARNTE - DICROCE
Lugar:
Córdoba
Reunión:
Otro; X Bienal del Coloquio de Transformaciones Territoriales; 2014
Resumen:
Este trabajo apunta a analizar las potencialidades de la organización popular en el proceso de lucha por la mejora de la situación habitacional, de cientos de familias, ubicadas en barrios afectados fuertemente por la inundación ocurrida el 2 de Abril de 2013 en la ciudad de La Plata, Provincia de Buenos Aires. Se analiza cómo, un fenómeno trágico de estas características, ayuda en el fortalecimiento de la organización en los barrios, y al impulso de los reclamos colectivos en pos de derechos relegados, como lo son la vivienda digna y el acceso a la tierra. Y, a su vez, detectar el rol de la arquitectura y sus herramientas para impulsar dicha organización, a través del análisis de la participación, durante todo el proceso, de la organización social Arqcom La Plata ?organización de estudiantes y graduados de arquitectura- en coordinación con organizaciones políticas y sociales, aportando respuestas técnicas que se convierten en herramientas para la política de los barrios. Se recopilará la experiencia de trabajo que surgió en tres asentamientos informales de las periferias de la ciudad de La Plata, donde se dieron procesos diversos, pero que confluyeron en un reclamo conjunto entre los tres barrios, con matices y variables interesantes de detectar para profundizar en el análisis de la organización barrial e inter-barrial. La reconstrucción del proceso, que se desencadenó desde el 2 de abril de 2013, resulta de importancia para detectar qué actores se involucran y aportan en el fortalecimiento de esta organización, y cuáles en detraimiento de la misma; posturas que se detectan al analizar cuáles son las contribuciones de cada uno, con qué objetivos y de qué forma. Organizaciones políticas, sociales y religiosas se involucraron en dichos procesos, con diferentes intereses y posturas ideológicas. ¿Cuál es la articulación entre las mismas y de estas con la organización barrial? ¿Qué conflictos se generan entre ellas? Son algunas de las preguntas que este trabajo busca dar respuesta, haciendo eje, principalmente, en las organizaciones sociales de profesionales del hábitat. Interesa detectar cómo se articulan los grupos de estudiantes y arquitectos que desarrollan trabajo barrial, ante la aparición de otras organizaciones, y cuál es su papel en el fortalecimiento de la organización popular. Cómo la arquitectura puede ayudar a impulsar dicha organización, sin desconocer los otros actores que intervienen en el proceso, y que son parte de la trama que se superpone en el territorio cuando se desencadenan estos conflictos, es uno de los objetivos de este escrito. Una situación trágica, como la mencionada, obliga a repensar las incumbencias de nuestra disciplina, las herramientas que tienen los profesionales del hábitat para enfrentar las situaciones de este tipo. La producción social del hábitat es una de las formas más común, actualmente, en las que se reproduce el espacio urbano, y, sin embargo, es de los ámbitos menos abordados por los profesionales de la arquitectura. Esta situación se da, no solo por el desconocimiento de la situación actual, sino por la falta de herramientas prácticas para abordar su desarrollo; además de la necesidad de una postura clara e ideológicamente fuerte, para considerarse como un actor más de la comunidad en la que interviene, y no como un actor externo que sólo aporta soluciones técnicas. Desde esta perspectiva, es necesario repensar la postura del arquitecto protagonista de los procesos creativos, para analizar su rol como constructor de procesos sociales, que impulsa la comunidad, donde sus ideas y conocimientos son puestos en diálogo y concertación con los conocimientos de las familias con las que trabaja. Se entiende a la organización popular como la estrategia central para la búsqueda de mejoras en la situación habitacional, los problemas de la vivienda y el acceso a la tierra son abordados de manera colectiva. El derecho a la vida digna, a una vivienda saludable, el acceso a un lugar de arraigo, a los servicios e infraestructuras de la ciudad, son necesidades que encuentran en el reclamo colectivo nuevos impulsos y fuerzas para hacerse escuchar, por lo que se hace necesario, en el proceso de lucha, el protagonismo de los habitantes, de manera organizada, en todas las etapas de gestión (V. Pelli, 2007). Son ellos quienes controlan las decisiones fundamentales, evolucionando hacia formas de organización social más complejas y efectivas (G. Romero y Mesias R., 2004) en la disputa y reclamo de sus derechos. Es necesario avanzar sobre los debates iniciados por H. Lefebvre (1969) sobre el derecho a la ciudad, para entender el habitar como proceso colectivo, para evitar la concepción individualista de la vivienda y el acceso a la tierra. En este camino, la concientización del colectivo resulta fundamental, fortaleciendo la idea de que, como dice D. Harvey (2008), el derecho a la ciudad ?no es simplemente el derecho de acceso a lo que ya existe, sino el derecho a cambiarlo a partir de nuestros anhelos más profundos?. Trabajar entorno a entender la movilización de las familias como parte de sus derechos, el reclamo por su participación en las decisiones sobre su destino es uno de sus derechos ciudadanos inalienables. En este contexto, la asistencia técnica interdisciplinaria es una herramienta fundamental en los procesos de organización popular, porque ayuda a construir propuestas concretas para dar respuestas, arraigadas en el deseo del colectivo. Mediante la búsqueda de soluciones a las necesidades básicas, la disciplina aporta a la construcción política del barrio, impulsa y fortalece las células de organización popular que son capaces de incidir en los procesos de cambio (SEHAS, 1987). A partir de este análisis, se pretende arribar a conclusiones que permitan repensar las herramientas y formas de trabajo desde la disciplina que ayuden a fortalecer la organización barrial y la red de trabajo con otras profesiones, instituciones y organizaciones. Se entiende que el desafío se centra entonces, en repensar, resignificar y reelaborar las herramientas (M. Enet, 2008), construidas desde la arquitectura, para abordar la producción social del hábitat. La coordinación para crear una red de trabajo, es sustento de esta experiencia, debe hacerse sobre la base de objetivos comunes, expectativas claras de todas partes, formas de ver el problema y perspectivas a futuro complementarias. Un trabajo que se proyecta en el tiempo y la construcción de un proceso de transformación ?como el mejoramiento de las condiciones del hábitat- requiere los aportes de organizaciones sociales y políticas, de los grupos de vecinos, de las diferentes disciplinas, con organizaciones gremiales de estudiantiles y graduados, en el campo universitario; lo que permite trabajar de manera coordinada con una amplia visión de las problemáticas y necesidades. El trabajo refleja la multiplicidad de actores, que se dispone en la experiencia analizada. El arquitecto en la producción social del hábitat es parte de una red de trabajo y coordinación, por lo que se hace necesario profundizar en cuáles son los objetivos, formas de accionar y capacidades de cada una de las partes; haciendo foco en cómo se da la articulación entre ellos, detectando potencialidades y limitaciones. Este trabajo busca su sustento teórico más allá del aprendizaje de la práctica misma, es por este motivo que se realiza un rastreo del material bibliográfico y debates actuales que aborden los temas propuestos, para construir un marco teórico y estado del arte, centrado en la discusión del rol de las acciones colectivas como estrategia para el acceso a la tierra y la vivienda en la producción social del hábitat. A su vez, se realiza la permanente recopilación de información, sistematización de datos e informes que reconstruyan el proceso, tanto desde la organización social de arquitectos como desde la organización vecinal. Este proceso de formación y re-evaluación de las definiciones constante, permite debatir, dialogar y contrastar con los debates teóricos contemporáneos para así reflexionar, repensarlos y reelaborarlos, a partir de la experiencia práctica relatada, realizando aportes a los mismos. El trabajo que comenzó a desarrollarse ante la ya mencionada tragedia, que permitió diversos espacios de coordinación y organización, demostró la necesidad de su existencia. Esta experiencia permitió, al momento, la obtención de materiales para más de trescientas familias organizadas, para el mejoramiento de sus viviendas. La coordinación estratégica y las redes de trabajo generadas permitieron desarrollar un Taller de Arquitectura Barrial en la Facultad de Arquitectura de la UNLP, integrado por estudiantes y graduados de esta unidad académica, abogados y trabajadores sociales, donde se trabaja junto a los vecinos de las asambleas. Propuesta que sienta precedente sobre la necesidad y posibilidad de la construcción de nuevos profesionales-trabajadores, abordando y buscando respuestas a las familias para la mejora de su hábitat, trabajando con casos reales, y construyendo arquitectura que se cree parte de un proceso, donde el proyecto es herramienta de lucha, es proyección de caminos, es material para el impulso de la organización barrial.