PERSONAL DE APOYO
LAITANO MarÍa Guillermina
congresos y reuniones científicas
Título:
Urbanización contrahegemónica: organización, lucha y derecho
Autor/es:
GUILLERMINA LAITANO; AGUSTÍN NIETO; ANA NÚÑEZ; CRISTIAN SAR MORENO
Lugar:
La Plata
Reunión:
Otro; III Coloquio Internacional de Conflictos Urbanos; 2023
Institución organizadora:
Red Iberoamericana de Investigación en Políticas, conflictos y movimientos urbanos
Resumen:
Este trabajo recupera un conjunto de reflexiones que venimos desenvolviendo en el marco de un proyecto interdisciplinario, cuya particularidad y condición de financiamiento era la vinculación de actividades investigativas, extensionistas y de transferencia a distintas instituciones públicas, proyecto que surgió de los distintos avances investigativos que diversos grupos veníamos teniendo en torno a un amplio campo interdisciplinar que se configura en torno a la denominada crisis urbana. Nuestra propuesta se erigió para contribuir a las demandas manifestadas por entidades barriales activas en relación a las condiciones del habitar, y así coadyuvar colectivamente a los requerimientos del gobierno local en torno al diseño de políticas habitacionales y derecho a la ciudad, sin desigualdad social. Indefectiblemente, incidir en una política del habitar requiere explicar no sólo cómo las fracciones sociales más desfavorecidas socialmente se relacionan/viven/perciben/conciben la producción del espacio-tiempo barrial, sino la tensión entre las estrategias sociales contrahegemónicas y la mercantilización urbana, como una de las dimensiones en que se dirime las contradicciones del capital. El objetivo de ello es promover frentes conscientes sobre las causas de la expoliación urbana (Kowarick, 1996) y sobre el proceso de construcción de las demandas sociales, y cómo ello se conecta con la acción política colectiva.Nuestro anclaje empírico territorial es un barrio popular de la ciudad de Mar del Plata (actualmente inscripto en el ReNaBaP), localizado en una chacra indivisa de 14 has y habitado por alrededor de 200 familias. Nuestra estrategia metodológica se sustenta en la extensión crítica (Tommasino, 2018), y con ejes implicados en la Investigación Acción Participativa (Fals Borda, 2015), junto al uso de nuevas técnicas de elaboración, procesamiento y análisis de datos desarrollados en torno al nuevo campo de las ciencias sociales computacionales y las humanidades digitales, para la investigación situada de la conflictividad barrial en la ciudad.En este marco, asumimos el conflicto como consustancial a la dialéctica de la producción del espacio-tiempo social, y aspiramos a superar cierto reduccionismo analítico basado en descripciones fenomenológicas de las relaciones posibles entre procesos sociales y formas espaciales. Asimismo, partimos de la premisa teórica que sostiene que la génesis de todo derecho (el derecho entendido como la forma paradigmática de las relaciones sociales de producción) es el conflicto social, y todas las complejidades y aristas del derecho a la ciudad se inscriben en esta premisa (Pashukanis, 1976). Es decir, intentamos problematizar el concepto de “periferia en disputa”, de manera de no reducirlo a una generalización empírica cosificada (barrios cerrados-toma-loteos irregulares), sino que convocamos al conflicto como las situaciones a través de las cuales la sociedad se define. O sea, enfocarnos en algunos problemas epistemológicos sobre cómo posicionarnos para “abrir” los conflictos y cuestionar esas falsas dicotomías. En efecto, el barrio que se ha ido configurando, no tuvo su génesis en una toma colectiva organizada por un movimiento social, sino en estrategias de reproducción familiar que son parte constitutiva del mismo conflicto. En tal sentido, cabe preguntarse en qué medida la actual crisis mundial es una coyuntura propicia para que las clases subalternas intenten tomar la iniciativa en los procesos de lucha y organización, desenvueltos en los espacio-tiempos comunitarios.La pertinencia de dicha pregunta se fundamenta en que, a partir de nuestro trabajo en el barrio, se han desenvuelto procesos organizativos en torno al proyecto de urbanización popular del barrio, la conformación de una cooperativa, talleres de estudio sobre legislación y normativa referente a los derechos en barrios populares y, a partir de allí, inicios de diálogo con la municipalidad y el propietario del predio. Sin embargo, es pertinente señalar que existe una triple fragmentación social: las familias que continúan participando del proyecto de urbanización, familias que alambran y venden porciones del predio, y un sector ligado al narcomenudeo. Otra contradicción emergente del proceso es que para concretar el acuerdo entre propietario, familias y municipio, implica modificar el uso del suelo de una parte del predio e impacta en la articulación de rentas y, por ende, en los precios del suelo de un barrio popular.