Evaluación del Farnesol como semioquímico repelente de hormigas cortadoras del género Acromyrmex sp. (Hymenoptera: Formicidae)

PERRI, DAIANA; FERNÁNDEZ, PATRICIA; BUTELER, MICAELA; GOROSITO, NORMA

Posadas, Misiones

Congreso; IX Congreso Argentino de Entomología; 2015

Sociedad Entomológica Argentina (SEA); Centro de Investigaciones Entomológicas (CIE)

Las hormigas cortadoras de hojas del genero Acromyrmex sp, son una de las principales plagas en los cultivos agrícolas y forestales. El control de esta plaga se realiza a través del uso de insecticidas químicos aplicados en polvo, líquidos o cebos, cuyos compuestos son altamente tóxicos para el ambiente y para los seres humanos. El objetivo del trabajo es la búsqueda de una alternativa de control para hormigas cortadoras, más amigable con el ambiente. Para ello se evaluó el farnesol (un sesquiterpeno presente en numerosos aceites esenciales) como repelente natural. Se colectaron colonias de Acromyrmex ambiguus en el Delta del Paraná, se llevaron al laboratorio, y se mantuvieron en condiciones estables de temperatura y humedad (25°C y 60% aproximadamente). Para evaluar la repelencia del farnesol, se diseñó un experimento con metodología de grilla y se utilizó pequeñas porciones de la colonia madre (mini-colonias). Se les ofreció a las hormigas 12 discos de papel de filtro distribuidos al azar en una arena de forrajeo. La mitad de los discos embebidos con 3 μl/disco de una dilución de farnesol (tratamiento) y la otra mitad embebida solo con 3 μl de metanol, que fue utilizado como solvente (control). Se probaron 3 concentraciones de farnesol: 1mg/ml, 5mg/ml y 10mg/ml. Se midió la preferencia de acarreo al cabo de 1 hora o hasta la remoción de la mitad de los discos. Posteriormente, se realizó un experimento con estacas de madera para evaluar la repelencia a una escala mayor, mediante el uso de la colonia entera, conectada a través de puentes de madera, a una batea que cumplió la función de arena de forrajeo. En dicha arena se ubicaron las estacas, éstas poseían una fuente de alimento en su extremo superior, y en la mitad de su longitud, un hilo de algodón embebido con farnesol como barrera. Se contabilizó el número de hormigas que atravesó el hilo, y se probaron tres concentraciones: 10mg, 50mg y 100mg. Finalmente, para evaluar si el mecanismo de acción del farnesol era por contacto o por sus volátiles, se diseñó un experimento con y sin exclusión del farnesol. En el primer caso, las hormigas debían entrar en contacto con el farnesol si querían acceder a una fuente de comida, y en el segundo, el farnesol estaba ubicado dentro de una pequeña jaula de exclusión de plástico que lo aislaba del contacto con las hormigas, pero permitía la difusión de sus volátiles. La concentración de farnesol evaluada fue 10 mg. Los tres experimentos fueron realizados en laboratorio, y repetidos con tres colonias. Los resultados de los ensayos de grillas y de estacas revelan la efectividad del farnesol como repelente de hormigas cortadoras de hojas. En los experimentos de grillas, en la dosis de 10mg/ml, las hormigas colectaron casi exclusivamente los discos control, evitando los tratados. En los ensayos con estacas, si bien las tres dosis produjeron diferencias significativas con el control, la concentración de 100 mg/ml fue la que tuvo mejores resultados. Los ensayos con y sin exclusión del farnesol indican que el mismo actuaría por contacto dado que, cuando las hormigas estuvieron expuestas solo a los volátiles del farnesol, no se observaron diferencias significativas entre tratamiento y control. Este último experimento fue planificado a partir de los resultados promisorios de repelencia del farnesol, con el propósito de evaluar la mejor estrategia para llevarlo al campo. Los resultados obtenidos nos permiten pensar en evaluar la eficacia y persistencia del farnesol como repelente a campo, para planificar una estrategia que incluya al farnesol como alternativa de manejo de hormigas cortadoras.