Balance sedimentario entre sistemas fluviales colectores y de transferencia, su implicancia en los ambientes sedimentarios intermontanos.

SURIANO, J.; LIMARINO, C. O.

Buenos Aires

Congreso; Reunión Argentina de Sedimentología; 2008

Asociación Argentina de Sedimentología

El ambiente de sedimentación intramontano forma reservorios clásticos capaces de almacenar grandes volúmenes de detritos susceptibles de ser retransportados y redepositados en cuencas próximas. Incluso en muchas cuencas de antepaís el ambiente intramontano se transforma en el principal reservorio y proveedor de sedimentos del área orogénica. En esta contribución se analiza el efecto que tendrá el balance de aporte sedimentario entre los sistemas fluviales colectores intramontanos y de transferencia hacia el área orogénica. Para ello se estudian los sedimentos actuales y pleistocenos expuestos a lo largo del río Jáchal (Precordillera de San Juan). Desde el punto de vista metodológico el sistema de circulación de sedimentos ha sido dividido en 4 órdenes, que incluyen desde menor a mayor jerarquía a: 1. sistemas coluviales que flanquean el margen de las cuencas, 2. cursos colectores que drenan longitudinalmente el área intermontana (p.e. río Caracol en el caso aquí analizado), 3. sistemas de transferencia que comunican distintas cuencas intermontanas (río Jáchal) y 4. ríos mayores que drenan los frentes de las áreas orogénicas y resultan el nivel de base regional (río Vinchina). El sector cabecera del sistema colector es principalmente erosivo y corresponde a la concurrencia de pequeños cursos tributarios que culminan en un canal principal de alta pendiente. El sector central se caracteriza por canales con diseño entrelazado y planicies externas cubiertas por flujos densos durante episodios de crecientes. Finalmente, la zona terminal se ubica en la desembocadura de los cursos colectores en el sistema de transferencia (río Jáchal). Allí la red fluvial desarrolla un diseño distributario y una clara morfología de conoide. Dentro del sistema de transferencia se reconocen tres situaciones reguladas por el balance sedimentario entre el aporte de los sistemas colectores y el río Jáchal. La primera supone un aporte sedimentario del sistema colector que ampliamente excede la capacidad de transporte del sistema de transferencia, llevando a la progradación de los conoides y formación de endicamientos a lo largo del río Jáchal. Estos endicamientos aparecen extensamente distribuidos en la región y han sido analizados por autores previos. Una segunda situación contempla sistemas colectores que exceden parcialmente a la capacidad de transporte del río Jáchal, promoviendo el crecimiento de planicies de inundación en el sistema de transferencia. Esta condición aparece expuesta en el área de Pachimoco, donde depósitos canalizados el río Jáchal pasan lateralmente a extensas planicies de inundación limo-arcillosas. Finalmente, la última situación plantea una capacidad de transporte del río Jáchal superior al aporte de los sistemas colectores. Cuando ello ocurre, el tamaño de grano de sedimentos transportados por el sistema de transferencia se incrementa, cesa la progradación de los conoides para dar lugar a la incisión de los mismos. Este es el caso que presenta actualmente el río Jáchal. Las tres situaciones descriptas aparecen en el registro sedimentario de los depósitos recientes y pleistocenos de la comarca. Debe recordarse que las nacientes del río Jáchal se ubican en áreas englazadas durante el Pleistoceno, a diferencia de los sistemas colectores que tienen sus cabeceras dentro de la Precordillera fuera del entorno glacial. Por ello, las tres posibilidades planteadas probablemente derivan de cambios en el caudal del sistema de transferencia originados durante la transición glacial-postglacial en la Cordillera de Los Andes. Además las características sedimentológicas del conoide claramente muestran que los sistemas lacustres no resultaron de endicamientos producidos por un único evento, como es frecuentemente asumido, sino más bien de la progradación del conoide resultado de un sistema de transferencia de baja eficiencia. . Una segunda situación contempla sistemas colectores que exceden parcialmente a la capacidad de transporte del río Jáchal, promoviendo el crecimiento de planicies de inundación en el sistema de transferencia. Esta condición aparece expuesta en el área de Pachimoco, donde depósitos canalizados el río Jáchal pasan lateralmente a extensas planicies de inundación limo-arcillosas. Finalmente, la última situación plantea una capacidad de transporte del río Jáchal superior al aporte de los sistemas colectores. Cuando ello ocurre, el tamaño de grano de sedimentos transportados por el sistema de transferencia se incrementa, cesa la progradación de los conoides para dar lugar a la incisión de los mismos. Este es el caso que presenta actualmente el río Jáchal. Las tres situaciones descriptas aparecen en el registro sedimentario de los depósitos recientes y pleistocenos de la comarca. Debe recordarse que las nacientes del río Jáchal se ubican en áreas englazadas durante el Pleistoceno, a diferencia de los sistemas colectores que tienen sus cabeceras dentro de la Precordillera fuera del entorno glacial. Por ello, las tres posibilidades planteadas probablemente derivan de cambios en el caudal del sistema de transferencia originados durante la transición glacial-postglacial en la Cordillera de Los Andes. Además las características sedimentológicas del conoide claramente muestran que los sistemas lacustres no resultaron de endicamientos producidos por un único evento, como es frecuentemente asumido, sino más bien de la progradación del conoide resultado de un sistema de transferencia de baja eficiencia.