BECAS
PEGORARO MarÍa Laura
congresos y reuniones científicas
Título:
“Cuidar el plan”: una forma de ganarse la vida en la Economía Popular de Resistencia
Autor/es:
PEGORARO, MARÍA LAURA
Lugar:
Tucumán
Reunión:
Encuentro; III ENCUENTRO NACIONAL DE LA RED DE ASENTAMIENTOS POPULARES: Emergentes y debates en torno al hábitat popular; 2023
Institución organizadora:
RED DE ASENTAMIENTOS POPULARES
Resumen:
Desde los años 70’ en Argentina comenzaron a transformarse las formas del trabajo, modificando también su rol de organizador social. El empleo en empresas (públicas o privadas), que previamente garantizaba la movilidad ascendente, comenzó a ser la realidad de una parte de la sociedad cada vez menor. Esta situación derivó en una serie de políticas sociales y socio-laborales, especialmente luego de la crisis del 2001. La confluencia de estas condiciones estructurales de acumulación del capital, con efectos directos en la variable trabajo en el país, y las acciones propuestas por el Estado para paliarlas, corregirlas, o transformarlas, creemos que condicionaron las experiencias de trabajo de lo que denominamos la economía popular (Gago, Cielo, y Gachet, 2018). En esta ponencia nos interesa poner el foco en las políticas de transferencias condicionadas que concibieron alguna organización del trabajo de los sectores populares, es decir, de aquellos que quedaron fuera del mercado del trabajo, y que en la actualidad refieren a una o dos generaciones que no tuvieron un empleo formal, con garantías asociadas a éste. El proceso de atención estatal al fenómeno cobra notoriedad con el Plan de Jefes y Jefas de Hogares Desocupados (Neffa, 2016), en el año 2002. Le siguieron el programa Argentina Trabaja (PRIST) vigente entre 2009 y 2018, la línea Ellas Hacen lanzada en ese marco desde el 2013 al 2016, cuando se implementó “Ellas Hacen-Nuevo Enfoque” . En 2018 lanzó el programa Hacemos Futuro , como reconversión de lo anterior. Por último, el Programa Nacional de Inclusión Socio-productiva y Desarrollo Local, “Potenciar Trabajo” inicia en 2020, y continúa vigente. El ámbito académico ha abordado estos programas con distintas miradas y enfoques teóricos, pero también analizaron las relaciones entre el estado y los sectores populares, algunos con la Economía Popular (EP) en particular. A modo de primer recorrido, podemos recuperar algunos de estos estudios que focalizan en las transformaciones de las políticas públicas que dieron cuenta del pasaje de la promoción de formas cooperativas o asociativas de trabajo, hacia las orientadas a la empleabilidad (Hopp, 2017; Ferrari Mango, 2021; Pizarro, 2021). Otros estudios, analizan la relación entre el gobierno y los sectores populares, haciendo foco en las orientaciones seguidas por el Ministerio de Desarrollo Social (MDS) de la Nación, encargado de implementar y seguir estas políticas (Paura, Zibecchi, y Delgado Williams, 2022), o bien de las élites que se desempeñaron como técnicos y funcionarios y las transformaciones en las políticas introducidas desde estas gestiones (Tapia Arias, 2021). También se ha analizado la forma en que se presenta la política en los barrios (Vommaro y Combes, 2016), siendo el clientelismo uno de los principales referentes conceptuales, con su uso peyorativo desde el sentido común y las divergencias que propone Auyero (2001) al incorporar el punto de vista de les clientes. A pesar del esfuerzo teórico, la imagen del habitus clientelar reforzó una imagen de rehén de les beneficiaries de programas u otras prácticas políticas, perdiendo la dimensión reflexiva de los actores, las negociaciones y controversias en las que se traman esos vínculos (Vommaro y Quirós, 2011). Otra línea de abordaje, que dialoga con esta última, pero escapa a la noción de clientelismo, para centrarse en las particularidades de la EP organizada, es la seguida por Fernández Álvarez (2016, 2018), quien da cuenta de cómo la experiencia de la precariedad dio paso a la construcción colectiva proyectada en una organización gremial: la Central de Trabajadores y Trabajadoras de la Economía Popular (CTEP). Natalucci y Mate (2020), por su parte, indagan cómo la CTEP junto con otros movimientos sociales contribuyeron en la promulgación de la Ley de Emergencia Social (LES), considerándola un hito, que puso en el centro del debate a la economía popular (diferenciándola de la economía social). Con esta política reivindicaron el rol de las organizaciones como representativas de los sectores populares, implementaron el Salario Social Complementario (Natalucci y Mate, 2020), como un derecho de quienes se inventaron su trabajo (Grabois y Pérsico, 2014). Finalmente, Pacífico (2020) analiza la trayectoria de una cooperativa surgida de los programas sociales, en el marco de la CTEP, donde nos muestra que lo definido por el estado es disputado desde las prácticas, pero también desde las lógicas y los horizontes que desarrollan sus interlocutoras/es, poniendo de manifiesto cómo se problematiza el trabajo productivo y la participación, y como se sostienen las construcciones colectivas a pesar de lo establecido por la línea Hacemos Futuro, en tanto descolectivización del trabajo cooperativo. Reflexionando con esta última serie de trabajos que piensan desde o con la EP, en esta ponencia realizaremos una primera (y provisoria) sistematización del trabajo de campo etnográfico (Guber, 2011) aún en proceso, iniciado en marzo del 2021 con una Unidad Productiva (UP) del Potenciar Trabajo en la ciudad de Resistencia, Chaco. La investigación indaga sobre las formas de valorización en la EP, mientras que en este texto indagaremos particularmente, desde las experiencias, las memorias y las prácticas de las mujeres que forman parte de esta UP de carpintería, sobre cómo las condiciones establecidas por los programas de transferencias condicionadas fueron articulándose, negociándose o disputándose con y desde las prácticas de ganarse la vida de estas mujeres, como así también, buscaremos delinear los modos en que esas prácticas fueron adquiriendo un valor social. La particularidad de este caso está en que las mujeres eran, analíticamente, parte de la EP no organizada hasta que se incorporaron a un movimiento social desde la implementación del Potenciar Trabajo . En este sentido, partimos de considerar que las transferencias condicionadas pueden ser pensada como una forma de gobierno (Foucault, 2006), de las prácticas de los sectores populares en este caso, en tanto construyen dispositivos que promueven una organización particular. A su vez, las prácticas de las mujeres dan cuenta de formas de ganarse la vida, que permiten abordar cómo se construyen las personas en sus dimensiones físicas, sociales, espirituales, afectivas, intelectuales, a partir de los modos de interacción que hacen disponibles diferentes tipos de recursos sociales de producción y consumo (Narotzky y Besnier, 2020). En el caso que analizamos, las formas de ganarse la vida van a ser pensadas en relación con los dispositivos o prácticas percibidas desde las experiencias de las mujeres como condiciones de los programas de transferencias. Al indagar en estas prácticas, comenzaremos a pensar cómo interviene este proceso en la construcción de valor, considerándolo como la importancia que adquieren las acciones para las personas (Graeber, 2013). La apuesta última de este abordaje, es que ampliando el análisis hacia el valor que asumen las actividades que se desarrollan en la EP, damos un pequeño paso en la discusión sobre las formas más abstractas del valor, esas que separan lo que es el trabajo productivo para el capital y el reproductivo para la vida (Narotzky y Besnier, 2020), tanto como reafirmamos la necesidad de pensar más acá de las dicotomías reificadas del estado-mercado-sociedad (Mitchell, 2015).Atendiendo a este planteo, recuperamos la observación participante y algunas entrevistas en profundidad realizadas con las mujeres en los períodos de marzo-diciembre de 2021, agosto 2022 a febrero 2023. Metodológicamente, acudimos a la noción de integración dinámica de las perspectivas de nuestras interlocutoras con las de quienes investigamos (Balbi, 2012). De esta manera, la ponencia se organizará en tres ejes, el primero reconstruye la experiencia histórica de las mujeres con los distintos programas de transferencias condicionadas de los cuales participaron, describiendo principalmente las características que ellas recuerdan, sus apreciaciones al respecto, tanto como la experiencia sobre las condiciones. El segundo eje, ahondará sobre su actual tránsito por el Potenciar Trabajo, donde repondremos en las transformaciones que experimentan en las condiciones del programa, los procesos de organización que están llevando adelante, las negociaciones, y la forma que asume ganarse la vida a partir de la práctica de cuidar el plan. Finalmente, en el último eje, abordaremos esta práctica de cuidar el plan como una forma de valor derivada de la articulación de lo particular de sus experiencias, como de lo social que ellas envuelven, realizando un primer ensayo para analizar los contextos de realización de este tipo de valor.