Los católicos preconciliares y su vínculo con la política en Argentina y Chile (1955-1964). Un estudio comparativo.

GOMES GABRIELA

San Carlos de Bariloche

Jornada; XII Jornadas Interescuelas Departamentos de Historia; 2009

Universidad Nacional del Comahue

A partir de la década del treinta el reformismo político-económico ocupó un lugar preponderante en la agenda política de la juventud católica, lo cual en muchos casos devino en la formación de partidos políticos con el fin de proponerse como una alternativa posible frente al comunismo y al conservadurismo reluctante a las reformas. Hacia la década de 1960, tras el Concilio del Vaticano II, se intensifica el "diálogo" entre marxismo y cristianismo, lo cual impulsó a mucho de los católicos argentinos y chilenos a radicalizarse respecto del universo católico tradicional. Lo que caracterizó al discurso de muchas agrupaciones católicas en Argentina y Chile, fue la novedosa conjunción entre la preocupación por la cuestión social y el nacionalismo económico. En el caso chileno, este discurso iniciado por la juventud conservadora e inspirado en la doctrina del humanismo cristiano, se sintetiza en el proyecto político del Partido Demócrata Cristiano formado en 1957 y las políticas de desarrollo económico llevadas a cabo por Eduardo Frei Montealva. En Argentina, tras la caída de Perón se evidencia una renovación en el campo católico, que trae aparejado el surgimiento de una nueva militancia que tiene que ver con la inserción de curas en ámbitos obreros, sindicales, estudiantes, marginales, etc. Sin embargo, los católicos argentinos a diferencia de los chilenos no llegaron a formar un partido político, incluso en algunas oportunidades han llegado a mostrar un fuerte desprecio por la política partidaria. Esta ponencia, a partir de una perspectiva comparativa, tiene por finalidad analizar cómo las distintas agrupaciones de católicos argentinos y chilenos se han vinculado con la política en el período 1955-1964. En este sentido, como eje central de este trabajo, nos interesa estudiar las razones que llevaron a que los jóvenes católicos chilenos hayan ponderado a la organización política, a través del Partido Demócrata Cristiano, mientras que los argentinos, no encontraron un partido en el que pudieran canalizar sus reivindicaciones.