INVESTIGADORES
IRIGOITIA Manuel Marcial
congresos y reuniones científicas
Título:
Brianella, Schistobrachia y Dendrapta, tres géneros de Lernaeopodidae (Copepoda) morfológicamente similares: ¿convergencia adaptativa o monofilia?
Autor/es:
IRIGOITIA, M.M.; BRAICOVICH, P.E.; LEVY, EUGENIA; CANEL, DELFINA; TIMI, J.T.
Lugar:
Salta
Reunión:
Congreso; IX Congreso Argentino de Parasitología; 2022
Institución organizadora:
Asociación Parasitológica Argentina
Resumen:
Lernaeopodidae agrupa 43 géneros de copépodos parásitos de peces de agua dulce y marinos. Entre las ramas basales de la familia se ubica un clado con géneros que parasitan mayoritariamente batoideos (rayas, chuchos, guitarras, entre otros) y que comparten la presencia de procesos posteriores dorsales a los sacos ovígeros. En este clado se han identificado 3 géneros, Brianella, Schistobrachia y Dendrapta, relacionados morfológicamente por poseer los extremos de las maxilas muy desarrollados en forma de órganos de sujeción, en detrimento de la función de una bulla ausente o vestigial. Estos géneros han sido registrados en distintas especies de rayas en el Mar Argentino. El objetivo del estudio fue analizar si las similitudes morfológicas entre estos géneros se deben a historias evolutivas comunes o si son producto de adaptaciones a los sitios de infección y hospedadores que parasitan. Luego de la inspección de 731 narinas de 18 especies de rayas, se encontró a Brianella corniger y Dendrapta nasicola parasitando 6 y 1 especies, respectivamente. Adicionalmente B. corniger se encontró en las aletas de 2 especies de rayas. Schistobrachia ramosa fue hallada en las branquias de Amblyraja doellojuradoi y en Dipturus brevicaudatus en una muestra de 24 y 94 ejemplares, respectivamente. Las relaciones entre los géneros se estudiaron a partir de la secuenciación de la subunidad menor ribosomal (18S). Para las comparaciones se incluyeron secuencias de los 4 géneros de Learneaopodidae disponibles en GenBank y una especie de Siphonostomatoida como grupo externo. A partir de la reconstrucción filogenética, se observó que los tres géneros constituyen un clado bien definido. Se concluye que, más allá de las diferencias en los sitios de infección, especies hospedadoras y formas de fijación que presentan estos tres géneros, sus relaciones filogenéticas son estrechas y evidencian un origen monofilético, con el desarrollo maxilar como sinapomorfía.