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La ponencia a presentar se inscribirá dentro del eje temático ?Desarrollo urbano, políticas públicas y su articulación con la gestión social del territorio?. El Plan Integral de Saneamiento de la Cuenca Matanza Riachuelo establece que las villas y asentamientos ubicados en el camino de sirga (márgenes del rio) deben ser relocalizados. En la Ciudad de Buenos Aires este proceso ha comenzado en el año 2011, con mucha lentitud, complejidades y tensiones entre los afectados y las diversas entidades estatales intervinientes. La ponencia busca indagar sobre los conflictos y resistencias específicas presentes en el proceso de relocalización de la villa 21 ? 24 del barrio de Barracas. En el mismo se tensionan fuertemente los intereses de los afectados por acceder a su derecho a integrar la ciudad y a una vivienda digna sin resignar el buen acceso a las centralidades urbanas que les otorga el barrio de Barracas, con los proyectos del Gobierno de la Ciudad que buscaron originalmente mudarlos a barrios más segregados.Para el análisis partiremos de los trabajos de Bartolomé (1985) y Brites (2004) sobre relocalizaciones, y los de Duhau (2004) sobre orden y conflictos urbanos en general. Más específicamente, utilizaremos los aportes de Smulovitz (2008), Merlinsky (2013) y de Delamata, Ricciardi y Sethman (2014) sobre la judicialización de los conflictos urbanos y los efectos de ese proceso sobre los repertorios de acción y demandas de los afectados, y los de Tilly (1984) sobre este último tema. Este trabajo presenta avances parciales de una investigación en curso sobre participación y organizaciones sociales en procesos de relocalización. Para esta investigación se realizaron entrevistas semi estructuradas, observación con y sin participación y un relevamiento de la legislación sobre la temática, además de la revisión de diversos informes que han hecho ONGs y diferentes entidades públicas.Como resultados preliminares, podemos destacar en primer lugar una tensión entre el diseño técnico y el deseo de los vecinos, que genera renegociaciones y disputas en la implementación del programa. Por otro lado, la misma ha sido cambiada a partir de la participación de los vecinos, lo que ha permitido también darle nuevos sentidos y potencialidades a la relocalización, como forma de integración y acceso a la ciudad, y, a la vez, a una vivienda digna. Por último, estas transformaciones están íntimamente ligadas al marco judicial en el que se desenvuelve el conflicto y, a partir del mismo, al rol preponderante que han adquirido ciertos profesionales de organismos de defensa estatales. Estas dinámicas han introducido a los vecinos a nuevas lógicas de articulación y negociación con el Estado, a la vez que transformaron y resignificaron sus repertorios de acción, sus demandas y las formas mismas de representación simbólicadel conflicto, que pasa ahora a ser una lucha por derechos.

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